IBEX 35: La tormenta en el mercado de bonos siembra el pánico en las bolsas

El IBEX 35 y los principales indicadores europeos se hunden un 2 por ciento ante la imparable subida de las expectativas de inflación y el desplome de los bonos

El IBEX 35 encajó un castigo del 2 por ciento y perdió los 8.800 puntos tras desatarse una tormenta en el mercado de bonos estadounidense que tumbó a las bolsas europeas.

El DAX también retrocede el 2,3 por ciento, el mismo porcentaje que se dejan el CAC y el Eurostoxx50. En Wall Street, los futuros del S&P500 anticipan caídas del 1,3 por ciento.

Si algo ha probado la historia es que las grandes caídas del mercado comienzan siempre en el mercado de bonos. Y la escalada hasta máximos de tres meses en las rentabilidades de la deuda estadounidense por el miedo a la inflación avisa de que llegan malas noticias.

Tienen razones los inversores para estar preocupados porque la inflación es el peor enemigo para las carteras. El problema es que está descontrolada por culpa de la escalada del petróleo y el gas en medio de una crisis energética global con la que no contaba el mercado.

El IBEX y los mercados trasladan la presión a los bancos centrales

La escasez de materias primas y los cuellos de botella derrumbaron a la industria de Alemania, malas noticias para la zona euro porque el sector servicios también hace aguas por culpa de la inflación.

Peor aún es el escenario que se abre para los bancos centrales, enrocados en su discurso de que la inflación es solo un fenómeno temporal. Cada vez parece más claro que esto no será así.

Toda una papeleta para la Fed, que está a punto de comenzar la retirada de estímulos. Y también para el Banco Central Europeo; está por ver cómo recibe la institución que preside Christine Lagarde el color del nuevo gobierno alemán. Al fin y al cabo, es su mayor accionista.

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El petróleo y el gas no dan tregua

Las causas de la tormenta hay que buscarlas en los mercados de energía. El petróleo está muy tensionado tras el decepcionane incremento de la oferta por parte de la OPEP. Este miércoles  superó los 83 dólares por barril.

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Además, los futuros del gas en Europa escalaron un 22 por ciento y batieron sus máximos históricos. El problema es que a su vez presionan sobre la electricidad y alimentan la espiral inflacionista. Y todo llega al mercado de bonos.

"Los inversores en bonos se están volviendo gradualmente bajistas", dijo Naokazu Koshimizu, estratega senior de tipos de Nomura Securitie.

Esta tendencia se vio impulsada por los "precios del petróleo más altos y las esperanzas de un medicamento oral contra Covid-19, además de  la mejora de los datos económicos de Estados Unidos", añadió este experto.

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El IBEX 35 pierde los 8.800 puntos

Dentro del IBEX 35, las mayores caídas son para Siemens Gamesa, Arcelormittal y Meliá Hoteles, todos con descensos superiores al 4 por ciento. El selectivo perdió con mucha claridad los 8.800 puntos.

Es noticia Telefónica, que se deja casi un 2 por ciento tras cuestionar el mercado la racionalidad de la venta de su división de fibra en España.

Ni un solo valor del índice cotiza con ganancias. Tan solo las compañías de corte defensivo, como Enagás o Red Eléctrica, limitan las caídas hasta el medio punto porcentual.

El dólar sube en medio de la tormenta

En los otros mercados, los inversores buscan los refugios de toda la vida, como es el caso del dólar, que vuelve a subir y deja la cotización del euro/dólar retrocediendo hasta las 1,1534 unidades.

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Pero en este contexto de aversión al riesgo, ni siquiera el oro, el refugio por excelencia, se libra de las caídas y pierde medio punto porcentual, hasta los 1.749 dólares la onza.

Tampoco escapa al castigo el bitcoin, que retrocede algo menos del 1 por ciento pero conserva la cota psicológica de los 51.000 dólares que conquistó esta semana.

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