No se fíen

 Independientemente de los acuerdos alcanzados el domingo por los países del eurogrupo para hacer frente a la crisis financiera, era muy probable que los mercados rebotaran hoy tras el descalabro de la pasada semana. Por eso, no se fíen de las subidas que están registrando los principales índices mundiales.

En esta crisis nada es lo que parece. Como en las guerras modernas, la primera víctima ha sido la verdad. Las medidas que hoy parecen oportunas, mañana no sirven ante cualquier nueva noticia que da otra dimensión inesperada a los acontecimientos. Es lo que tiene mentir desde el minuto 1.

De momento, la única verdad está en las Bolsas, que con sus desplomes están anticipando los dramáticos meses que aparecen por el horizonte. Porque esta crisis no es sólo financiera. Y los inversores tendrán oportunidad de comprobarlo en los próximos días. La avalancha de resultados empresariales que se esperan será un buen termómetro para medir en que situación nos encontramos. Por ahora, dejen el cava en el frigorífico porque no hay nada que celebrar.