La gestión pasiva y las órdenes robotizadas han contribuido a profundizar las caídas

Las caídas se han desatado por el miedo a las presiones inflacionistas en EE.UU. pero, sin duda, la gestión pasiva y las órdenes robotizadas han contribuido a que estos descensos se pronunciaran.

Gran parte de las decisiones de inversión mundiales actualmente están automatizadas por lo que, cuando se dan caídas fuertes, los stopsloss fijados por los algoritmos van cayendo como fichas de dominó. Además, también las subidas sin descanso habían llevado a que los índices necesitaran una corrección sana.

Es curioso que, a pesar de estos movimientos tan agresivos, el mercado americano sigue prácticamente plano en el año, por lo que estas caídas podrían tratarse de una simple corrección técnica esperada. No obstante, es pronto para saberlo y debemos ir monitorizando los movimientos para confirmarlo, pues hemos visto saltar grandes posiciones cortas en el VIX.

Por ello,para quien esté dentro del mercado con una cartera diversificada y de largo plazo, no es momento de salir. Sin embargo, los inversores de más corto plazo, deben estar atentos a los movimientos cortoplacistas para aclarar si es una corrección técnica saludable o algo más. En cualquier caso, las inversiones deben estar protegidas con stop loss.

En el caso del mercado español, el nivel a vigilar en el Ibex 35 son los 9.500 puntos. En los 9.650 se ha defendido bien, pero si se cae por debajo de 9.500, no tiene soportes relevantes hasta los 8.700 puntos.

Nelson Cruz, director de Trading de OreyiTrade