El Gobierno brasileño negocia salidas para los estados en crisis financiera

El presidente brasileño, Michel Temer, se reunió hoy con autoridades de los estados de Río de Janeiro, Río Grande do[…]

El presidente brasileño, Michel Temer, se reunió hoy con autoridades de los estados de Río de Janeiro, Río Grande do Sul y Minas Gerais para negociar salidas a la grave crisis que ha llevado a esas regiones a un virtual estado de quiebra.

Esos tres estados, que históricamente fueron considerados entre los más prósperos del país, han declarado lo que en Brasil se conoce como "calamidad financiera", que es casi equivalente a una quiebra, en virtud de sus abultadas deudas y escasa recaudación.

El ministro de Hacienda, Henrique Meirelles, quien participó en la reunión, explicó que el Gobierno, que atraviesa su propia crisis fiscal, propuso varias alternativas que incluyen una renegociación de las deudas de esas regiones con el Estado, lo que pudiera aliviar en parte sus flujos de caja.

Meirelles no precisó las sumas adeudadas por cada estado, pero dijo que la renegociación propuesta pasaría en primera instancia por una suspensión temporal de los pagos, que serían reanudados una vez que cada una de esas regiones recupere su capacidad financiera.

Aclaró, sin embargo, que el Gobierno exigirá como contrapartida la adopción de severas medidas de austeridad, que incluirán desde fuertes recortes en el gasto hasta una "reducción de activos", que en la práctica pasaría por planes de privatizaciones de empresas a cargo de cada estado.

"Eso permitiría que los estados inicien un proceso de recuperación y restauren sus condiciones financieras", declaró el ministro, quien explicó que cada gobernador deberá decidir si acepta las condiciones propuestas por el Gobierno.

La situación es especialmente crítica en Río de Janeiro, que se declaró en "calamidad financiera" a mediados de este año, casi en vísperas de los Juegos Olímpicos Río 2016, y desde entonces ha visto agravada la situación de sus finanzas.

Para intentar atajar la crisis, las autoridades de Río de Janeiro han propuesto un duro ajuste fiscal y han llegado incluso a dividir en cuotas los salarios de sus funcionarios.

Publicidad
Publicidad

Esas polémicas medidas, que todavía se discuten en la Asamblea Legislativa regional, han causado protestas casi diarias, que en ocasiones han degenerado en violentos enfrentamientos en el centro de la que es conocida como la "ciudad maravillosa".

En portada

Noticias de