El Eurogrupo prepara medidas para aliviar la deuda griega

Los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro examinarán en el próximo Eurogrupo del 24 de mayo posibles medidas a "corto, medio y largo plazo" para aliviar la deuda griega, según han acordado en una reunión extraordinaria en Bruselas tras examinar las últimas reformas adoptadas por Atenas.

Así lo ha anunciado el presidente del Eurogrupo, el ministro holandés Jeroen Dijsselbloem, al término de la reunión, en una rueda de prensa en la que ha explicado que se hará un trabajo preparatorio a nivel técnico en las próximas semanas para fijar los criterios.

El objetivo es "diseñar la condicionalidad de las medidas" para reestructura la deuda, dejando claro que cualquier opción debe pasar por el pleno cumplimiento de las medidas ya acordadas en el marco del tercer rescate y que en ningún caso se contemplará una quita. "No hay decisiones tomadas", ha advertido Dijsselbloem.

También ha dejado claro que el Fondo Monetario Internacional (FMI) es un socio "clave" en el proceso y que para el Eurogrupo "no es una posibilidad" avanzar sin el apoyo del fondo.

El ministro de Finanzas francés, Michel Sapin, ha destacado que, si bien el FMI ha mostrado "una serie de exigencias o reticencias", el organismo internacional "está a bordo". "El FMI está con nosotros y espera que haya una conclusión sobre la deuda para poder implicarse más", ha añadido.

Por su parte, el ministro heleno, Euclides Tsakalotos, ha celebrado la señal del Eurogrupo y ha destacado también el compromiso de avanzar a nivel técnico en las próximas "dos semanas", de cara a concluir la primera revisión del rescate, lo que desbloqueará el pago de un nuevo tramo de más de 5.000 millones de euros.

"Es lo que necesita Grecia y lo que necesitan sus acreedores. Necesitan sentir una realidad de que Grecia ha pasado página y que el círculo vicioso de los últimos dos años se ha terminado", ha asegurado Tsakalotos.

Para la reestructuración, el Eurogrupo contempla un enfoque "secuencial" que arrancaría con una primera fase a corto plazo para "optimizar la gestión" de la deuda.

A medio plazo, las medidas que se analizarán en las próximas semanas tienen que ver con alargar los vencimientos y plazos de pago y sólo se aplicarían "a finales de 2018 o principios de 2019", cuando concluya el rescate, según ha explicado Dijsselbloem.

En una tercera fase, a largo plazo, se estudiarán medidas adicionales de reestructuración, cuya puesta en práctica estará condicionado a que Atenas cumpla con sus objetivos de superávit primario. "Es justo asumir que Grecia tendrá problemas de deuda a largo plazo", ha dicho Dijsselbloem.

ACUERDO EN DÍAS PARA NUEVO DESEMBOLSO

El vicepresidentes de la Comisión Europea para el Euro, Valdis Dombroskis, ha confiado en que el acuerdo a nivel técnico para cerrar la revisión se produzca "en los próximos días", incluido en lo que se refiere al plan de contingencia que se exige a Atenas.

Aunque la declaración del Eurogrupo no recoge este calendario, sí celebra la adopción por parte del Parlamento griego de la reforma de las pensiones y la subida de impuestos que reclamaba la troika para concluir positivamente la primera evaluación del rescate de 86.000 millones de euros, y que permitirá el desembolso de un nuevo tramo de más de 5.000 millones de euros.

"Debería allanar el camino hacia una conclusión exitosa de la primera revisión del programa", indica la declaración, que señala también que el acuerdo pasa por la adopción del plan de contingencia que prevé ajustes adicionales que sólo se pondrán en práctica si Atenas no cumple con los objetivos fijados por sus acreedores en 2018.

El Eurogrupo también ha celebrado el acuerdo para la adopción en Grecia de la ley para crear el fondo para privatizaciones, que la eurozona espera que esté plenamente operativo "en septiembre de este año a más tardar".

El ministro eslovaco de Finanzas, Peter Kazimir, ha asegurado al término del encuentro que la discusión había ido "mucho mejor de lo esperado", mientras que el titular finlandés, Alexander Stubb, se ha mostrado "cautelosamente optimista" sobre las opciones de acuerdo en las próximas semanas.