Gas Natural afronta dos años difíciles, ¿arriesgamos?
El nuevo plan de la compañía y los resultados han decepcionado, en un entorno de bajos precios de las materias primas y devaluación de las divisas latinoamericanas. No obstante, algunos analistas creen que las caídas dejan una oportunidad de entrada en un
Gas Natural ha presentado en los últimos días unos resultados trimestrales y un nuevo plan estratégico que han dejado más bien frío al mercado. Aunque nadie esperaba unas cuentas brillantes en un periodo caracterizado por la caída del precio del petróleo y las materias primas (Gas Natural ha recortado su beneficio en un 18 por ciento y el ebitda, en un 9 por ciento), pocos anticipaban un plan estratégico tan conservador. «Los resultados fueron ramplones. La erosión se ha distribuido por todas las líneas de negocio y la devaluación de las divisas en Latinoamérica no ha ayudado. Por eso, la atención estaba en las guías para los próximos dos años, con objetivos deseables para 2020. Pero el plan estratégico nos dejó un poco decepcionados», explica Miguel Sánchez, analista de Mirabaud Securities en España.
En concreto, el principal punto que preocupa a los expertos es que el plan refleja una debilidad importante del negocio de la compañía en los próximos dos años, antes de comenzar a repuntar de cara a 2020: «Lo que no ha gustado al mercado es que las perspectivas para 2016 y 2017 son bastante flojas. El beneficio neto puede estar en torno a 1.300-1.400 millones, frente a los 1.500 millones de euros que se generaron en 2015», relata Álvaro Navarro, analista de Intermoney.
Por eso, Sonia Ruiz de Garibay, de Beka Finance, tiene una recomendación de «neutral» sobre el valor (al igual que la mayoría del consenso del mercado recogido por Bloomberg). «Para quien esté en el valor, que siga ahí porque tiene una buena rentabilidad por dividendo y una buena diversificación por país. Pero, el que no esté, es mejor que espere porque hay otras alternativas en el sector y ya habrá otros momentos para entrar una vez que tengamos más visibilidad operativa», añade Ruiz de Garibay. En concreto, esta experta prefiere Red Eléctrica o Enagás frente a Gas Natural, teniendo en cuenta la bajada de los riesgos regulatorios que se ha producido en ambos valores tras la reforma del sector.
Sin embargo, hay analistas que opinan que este difícil escenario y las recientes caídas del valor en bolsa han brindado una excelente oportunidad para entrar en Gas Natural a mejores precios.
Miguel Sánchez, por ejemplo, opina que Gas Natural «ha lanzado unas guías muy prudentes para asegurarse un alto grado de cumplimiento, por lo que no sería difícil que pudiera hacerlo mejor de lo previsto en un mejor escenario de las variables de mercado».
Además, no hay que olvidar que Gas Natural es una compañía con «muchas fortalezas», como su solidez desde el punto de vista financiero o su presencia en Latinoamérica, desgrana.
Pero si hay un motivo que destaca entre los demás para apostar por este valor es la golosa política de retribución al accionista, con un «pay-out» del 70 por ciento y un dividendo suelo de un euro por acción, un pago que Ángel Pérez, de Renta 4, y otros analistas consideran «totalmente sostenible» debido a la «sólida generación de caja» de la compañía.
Más allá de eso, Álvaro Navarro, de Intermoney, explica que la compañía gasista paga ese dividendo tan elevado (que arroja una rentabilidad por dividendo cercana al 6 por ciento) porque «trata de transmitir que, aunque haya un entorno malo para la compañía en el corto plazo debido al castigo que está sufriendo su negocio de gas y también de generación eléctrica, va a ser capaz de mantener el dividendo sin verse obligada a aumentar el nivel de apalancamiento».
Por todos estos factores, Miguel Sánchez asevera que estamos ante «un buen momento de entrar en Gas Natural a buen precio». «Creemos que su cotización ya recoge un escenario pesimista y que el mercado reconocerá a una compañía con buenos fundamentos si las situaciones de mercado acompañan. Con una cierta normalización de las divisas, de los precios de las materias primas y del Brent debería reflejar una mejora», dice Sánchez, quien tiene un precio objetivo de 18,2 euros con recomendación de «compra» en Gas Natural.
Por eso, «ahora lo que hay que hacer es tratar de valorar si el impacto y la caída que dice Gas Natural es un escenario conservador o si podría cumplirse», dice Sánchez, quien ofrece su impresión al respecto: «Aquí el tema es que ha coincidido un trimestre muy malo con la necesidad de la compañía de actualizar su plan estratégico. Eso hace que, ahora mismo, el mercado no le dé credibilidad. Pero tampoco creo que el gas vaya a estar mucho más bajo de lo que está».
En todo caso, Álvaro Navarro pide cierta cautela. Dice que, aunque «Gas Natural esté barata a los precios actuales», estas compras deben hacerse con «prudencia» porque estas variables de mercado no se van a dar la vuelta inmediatamente.
LAS CLAVES DEL PLAN ESTRATÉGICO
Generosa política de reparto a los accionistas:
- Payout del 70 por ciento (respecto al 62 por ciento de los últimos años)
- Dividendo mínimo de 1 euro por acción
- Se entregarán al menos 7.000 millones de euros entre 2016 y 2020
Inversión de 14.000 millones para el periodo:-Esto supone una media anual de 2.800 millones (un 65 por ciento más que el ritmo de su anterior plan estratégico)
-Gran parte de la inversión se realizará en el exterior, en activos de generación eléctrica y, en especial, en renovables
Incremento del beneficio a un ritmo del 4 por ciento anual:-Hasta alcanzar los 1.800 millones de beneficio al término del periodo (un 20 por ciento más respecto a 2015)
- Si bien, el plan tiene «trampa» pues contempla una fase inicial con un crecimiento más moderado debido al «escenario desafiante» de los precios del petróleo
Reducción de la deuda hasta los 15.600 millones en 2020