Abengoa. El rescate en el alambre con los políticos enfrentados y los trabajadores en huelga

Abengoa continúa aferrándose a la petición de 20 millones a la Junta de Andalucía mientras que la oposición ataca al Gobierno regional y los empleados inician una huelga

La dirección de Abengoa presida por Gonzalo Urquijo se mantiene inflexible con su argumento de que la viabilidad de la compañía pasa por la inyección de 20 millones de euros por parte la Junta de Andalucía y que deja la reestructuración en el alambre.

El Ejecutivo regional también se muestra inamovible en su postura de asegurar que no poseen instrumentos financieros para aportar el montante.

Con las posiciones enfrentadas, Abengoa insiste en que había un compromiso verbal por parte del equipo de Juanma Moreno mientras el gobierno que preside no confirma este hecho.

El PSOE se enfrenta a Moreno

La secretaria general del PSOE Andalucía, Susana Díaz, señaló que no entendía cómo no había 20 millones para Abengoa, “pero si 11 millones para continuar con la manipulación de Canal Sur”.

Es la respuesta del principal partido de la oposición al consejero de Hacienda y Financiación Europea, Juan Bravo, que una vez más insistió en que no existen fórmulas jurídicas para la reclamación de la ingeniera.

Bravo fue el primer cargo del gobierno en reconocer que los principales temores de la Junta eran la “falta de transparencia” de Abengoa y el temor a verse sentados en el banquillo “como ya sucedió en el pasado”.

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Ultimátum de los acreedores

Tras estas declaraciones el Ejecutivo andaluz declaró de forma oficial tras un consejo de gobierno que no poseían la capacidad necesaria para la operación.

Abengoa movió ficha y aseguró que sí podían inyectar los 20 millones y logró que sus acreedores que han acudido a la reestructuración, con una suscripción del 85%, la otorgasen 15 días más para negociar con la Junta.

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El plazo impuesto por la multinacional a Andalucía concluye el 15 de pctubre y desde el PSOE se preguntan “por qué Juanma Moreno está dispuesto a hacer fracasar el plan de reestructuración” y califican como “extrañeza” y “sorpresa” sus reticencias.

Sin los 20 millones, no hay nóminas

La dirección de la sociedad insiste en que no puede efectuar el pago de las nóminas pues necesita la liquidez que pide a la Junta.

Desde el verano, pese a conocerse ya el acuerdo de reestructuración, los empleados siguen con nóminas pendientes de cobro y por ello realizan este viernes una huelga.

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Los comités firmantes convocan a los 1.100 trabajadores de la planta Palmas Altas a un paro por estos retrasos, los ERTE continuados y la obligación de trabajar de forma presencial pese al Covid-19.

El sindicato mayoritario de la empresa, UGT, promovió el paro asegurando que son “los primeros que queremos que la compañía continúe siendo un referente mundial”.

Los dirigentes sindicales señalan que la multinacional ha incluido a los trabajadores “en varios expedientes de regulación temporal de empleo y ha retrasado, y sigue haciéndolo, el abono del nuestro salario de forma recurrente sin dar soluciones concretas”.

Los minoristas buscan nuevas vías

Por su parte, los accionistas minoritarios, agrupados en la plataforma Abengoashares, instan a la Junta a apoyar a Abengoa y no al “plan Urquijo”. Desde la plataforma califican como “evidente” la “muerte” de la estrategia de Urquijo.

Los minoritarios creen necesario el apoyo de la Junta y que no es necesario que la inyección se destine a los planes de la dirección de la empresa, sino a salvar la compañía.

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Desde Abengoashares aseguraron que iniciaron contactos con otros miembros del consejo ante “cinco negativas de Urquijo” para lograr avances en las negociaciones.

El consejo rechazó por dos veces la celebración de una junta extraordinaria de accionistas algo que para esta plataforma es “incompatible con la legislación societaria”.

Los pequeños inversores insisten en lograr un acuerdo para aumentar su peso en Abenewco1, fijado en el 2,7% para los accionistas de la antigua Abengoa desde el 77% precedente.

Además, continúan solicitando conocer el volumen de adhesión al pasivo de 153 millones de euros motivo por el cual la ingeniera está en causa de disolución.

Reclamaciones a la justicia

Abengoashares pidió la suspensión cautelar del acuerdo de reestructuración ante el Juzgado Mercantil 1 de Sevilla, pero el juez Javier Carretero lo consideró válido.

El auto expone que no hay lugar a una suspensión, pues la tutela y la demanda del acuerdo están garantizadas. Eso sí, no impone ningún tipo de multa, sanción o costas temerarias.

La posición de Anbengoashares tras conocer la decisión judicial fue asegurar “el partido no se ha terminado” por el hecho de que aún se puede recurrir la decisión ante la Audiencia Provincial. 

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