Puigdemont dice que la cárcel es mejor que ser español

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, se enfrenta esta tarde a la hora de la verdad. Metido[…]

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, se enfrenta esta tarde a la hora de la verdad. Metido en un callejón sin salida, se enfrenta a una decisión que puede marcar el futuro catalán, la posible declaración unilateral de independencia. Presionado por sus socios anticapitalistas de la CUP, Puigdemont planea declarar una independencia "progresiva" que abra paso a un proceso constituyente, una alternativa que contará con la firme oposición del Estado, dispuesto a frenar como sea el desafío separatista. 

La mala noticia para Puigdemont es que las fuerzas de seguridad del estado vigilarán de cerca sus movimientos, porque no en vano, el presidente de la Generalitat podría incurrir en un delito de sedición, con penas que podrían suponer de uno a quince años de prisión. Pero a Puigdemont parece que esta posibilidad no le quita el sueño. "No estoy lidiando con mis propios deseos privados", declaró del político este verano en una entrevista con Bloomberg. "Estoy lidiando con los deseos de una parte muy significativa de la sociedad catalana y necesito asumir las responsabilidad por eso", apunta Puigdemont. Ante la amenaza de cárcel, Puigdemont asegura que está dispuesto a pagar el precio. 

En juego está el futuro de un territorio estratégico para España, con una superficie similar a la de Bélgica, con un 16% de su población y un 19% de su Producto Interior Bruto. Y desde Madrid, no piensan quedarse con los brazos cruzados. "Si este señor declara unilateralmente la independencia, habrá que tomar medidas", advirtió el lunes la vicepresidenta del gobierno central Soraya Sáenz de Santamaría. Sobre la mesa está la aplicación del artículo 155 de la Constitución, que prevé la suspensión del autogobierno de Cataluña, restaurado tras la dictadura de Francisco Franco (1939-1975), o incluso decretar un estado de emergencia en la región.

Pero Puigdemont no parece dispuesto a recular, a juzgar por las declaraciones que efectuó a Bloomberg. "Cuando aquellos que la vivimos desde el principio analizamos la historia de Cataluña, uno no tiene derecho a dar un paso atrás si ha accedido a ser presidente", asegura Puigdemont. Después de años movilizándose y reclamando sin éxito un referéndum acordado con Madrid, los nacionalistas creen que se consideran legitimados para declarar unilateralmente la secesión. Y Puigdemont ha dejado claro que está dispuesto a pagar el precio. 

En portada

Noticias de