Cómo identificar estafas en créditos rápidos y minipréstamos

Los españoles han visto cómo los bancos tradicionales se
negaban a otorgarles crédito es la época inmediatamente posterior al rescate
bancario. Sin embargo, las necesidades y aprietos económicos experimentados por
las familias de nuestro país seguían siendo las mismas o superiores. Es decir,
la cuesta de enero seguía planteando necesidades de financiación, al igual que
el regreso al cole de los más pequeños después del descanso vacacional.

Muchos consumidores solían recurrir en el pasado a pequeños
préstamos personales para cubrir estas necesidades temporales; sin embargo, los
bancos cortaron el grifo, precisamente, cuando más se necesitaba.

El resultado fue el perfecto caldo de cultivo para la
proliferación de préstamos rápidos. Ahora bien, según nos cuentan desde el comparador de minicréditos dinero-rapido.eu,
entre tanta oferta, también ha habido oportunistas que han intentado
beneficiarse de la desesperación de determinadas personas, ofreciendo préstamos
en condiciones totalmente inaceptables o directamente haciéndose con el dinero
de éstas.

¿Cómo puedes evitar que te engañen con los créditos rápidos?

Aunque los créditos rápidos y minipréstamos no han estado
exentos de críticas debido a que las condiciones de financiación son más duras
que las propias de un préstamo tradicional, lo cierto es que estas entidades
están obligadas a cumplir con la legislación correspondiente; más
concretamente, con la Ley 22/2007 de regula la comercialización de servicios
financieros a distancia destinados a consumidores. Es decir, este tipo de
entidades operan bajo el amparo de la ley y sometiéndose a una serie de normas
específicas.

Si quieres identificar a estafadores que no cumplen con las
normas establecidas o que tienen la intención de quedarse con tu dinero sin
proporcionar ningún tipo de servicio, te recomendamos prestar atención a los
siguientes indicios.

Bajo ningún concepto envíes dinero de forma previa a un prestamista

No tiene ningún sentido ni forma parte de la práctica
habitual el hecho de tener que enviar dinero a una entidad de préstamos rápidos
para poder tener acceso a algún tipo de financiación. Lo más probable es que se
trate de algún tipo de estafa.

Asegúrate de que la empresa en cuestión está adherida a la AEMIP

La Asociación Española de Micropréstamos aglutina a
todas las empresas que ofrecen este tipo de servicios de una forma legítima y
cumpliendo con la legalidad vigente. Además, la adhesión a esta asociación
implica el cumplimiento de un Código de Buenas Prácticas, cuyo propósito es
evitar llevar a cabo abusos sobre los clientes. En el caso de que la empresa a
la que acudas no forme parte de la AEMIP, existen muchas probabilidades de que
se trate de una estafa o de que sus condiciones resulten totalmente abusivas.

Revisa el certificado digital del portal web

Con el fin de garantizar que las transacciones y gestiones
llevadas a cabo a través de un portal web cuentan con una adecuada protección,
las empresas que comercializan los créditos rápidos y mini créditos deben costear
un certificado digital. Para comprobarlo, basta con examinar en la barra del
navegador la presencia de un icono en forma de candado y el hecho de que el
nombre y descripción aparezcan en verde. De esta manera, se garantiza que todas
las conexiones llevadas a cabo a través de la página web están cifradas
mediante la tecnología conocida como SSL.

Una dirección HTTPS es siempre un buen indicio de seguridad

Por otro lado, también puedes verificar la seguridad del
portal web de la empresa de mini créditos a la que acudas, examinando que la
dirección de la página web está utilizando un protocolo seguro de transferencia
de hipertexto, también conocido como https. Estas siglas deberían estar
presentes en las distintas URLs de la página web. Para comprobarlo, basta con
que copies la URL y la pegues en un blog de notas o cualquier documento
digital. Dicha URL debería comenzar con las siglas https

Quizá te preguntes el motivo de hacer tanto hincapié en la
presencia de estos estándares de seguridad. Lo cierto es que las organizaciones
que llevan a cabo estafas suelen tener un gran nivel de rotación en su
presencia online; es decir, las páginas webs que utilizan suelen estar
publicadas durante poco tiempo.

Además, las empresas de microcréditos con negocios legítimos
tienen que garantizar que los datos que sus usuarios les proporcionan a través
de su website están protegidos frente a intentos de robo.

Con estas comprobaciones podrás verificar muy fácilmente
que la página web no es ningún tipo de falsificación o suplantación creada
para hacerse con los datos de los visitantes.

En definitiva, evitar estafas con los créditos rápidos está
en tu mano y es más sencillo de lo que podría parecer en un primer momento.
Tomarte estas pequeñas molestias apenas debería llevarte unos minutos de tu
tiempo y, a cambio, te ahorrará serios quebraderos de cabeza o cosas mucho
peores.