Brasil anota su mayor crecimiento en seis trimestres impulsado por el consumo

Brasil registró un crecimiento del 0,8 % en el tercer trimestre del año frente al segundo, su mayor expansión en los últimos seis trimestres, impulsado por la recuperación del consumo, que volvió a convertirse en la principal locomotora de la mayor economía de Sudamérica.

El Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil no crecía a ese ritmo desde el primer trimestre de 2017, cuando se expandió un 1,1 % frente al último de 2016, según los datos divulgados hoy por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE).

De acuerdo con el organismo, impulsada por el resultado del tercer trimestre, cuando creció un 1,3 % frente al mismo período de 2017, la economía de Brasil acumuló una expansión del 1,1 % en los nueve primeros meses de 2018 y del 1,4 % en los últimos doce meses.

Los resultados muestran que Brasil mantuvo la lenta recuperación que viene experimentando desde 2017, cuando creció un 1,1 %, tras la profunda recesión de los dos años anteriores, la mayor en varias décadas y en la que el país acumuló una retracción económica de casi 7 puntos porcentuales (3,5 % en 2015 y 3,3 % en 2016).

Los resultados divulgados hoy son acordes con las proyecciones de los economistas del mercado financiero, que esperan para este año un crecimiento del 1,39 %, y del propio Gobierno, que prevé una expansión del 1,4 % en 2018. Tanto economistas como Gobierno prevén que la recuperación seguirá su marcha y que la economía de Brasil crecerá cerca del 2,5 % en 2019.

Pese a que los números muestran que el ritmo de crecimiento de Brasil finalmente se aceleró, los economistas ya esperaban este resultado debido a la baja base de comparación, ya que en el segundo trimestre de 2018 la economía fue fuertemente impactada por una huelga de camioneros que paralizó el país por once días en mayo.

Según la economista Rebeca Palis, la responsable de las cuentas nacionales del IBGE, esa variable no impide destacar que el crecimiento de la economía brasileña comenzó a acelerar impulsada por el consumo de las familias, que creció un 0,6 % en el tercer trimestre, su mejor resultado desde el tercer trimestre de 2017, tras sólo haber aumentado un 0,1 % en el segundo.

Palis explicó que el consumo, que creció por séptimo trimestre consecutivo, se recuperó gracias a la mejoría de la economía en general, que ha permitido una reducción del desempleo, mayor acceso al crédito, menores tasas de intereses y una inflación bajo control.

A juicio de la economista, con la caída del desempleo, aunque a un ritmo lento y principalmente por la generación de puestos de trabajo informales, y el control de los precios, la masa salarial de las familias aumentó y, consecuentemente, el consumo.

Palis aseguró que la inversión, que creció un 6,6 % y obtuvo su mayor expansión desde el último trimestre de 2009, también contribuyó para el buen resultado del tercer trimestre pero que el dato que hay que conmemorar es de la retomada del consumo.

"Aunque la tasa de crecimiento de la inversión fue superior a la del consumo, este tiene un peso tres veces superior. El consumo de las familias tiene un peso del 60 % en la composición del PIB mientras que el de la inversión es de menos del 20 %", dijo.

El crecimiento del consumo en la comparación con el tercer trimestre del año pasado fue del 1,4 %, su sexta expansión trimestral consecutiva.

Pese a la recuperación, el PIB brasileño tan sólo regresó en el tercer trimestre al mismo nivel en que estaba en el primer semestre de 2012 y aún está un 5 % por debajo del nivel que alcanzó en el primer trimestre de 2014, cuando la economía de Brasil marchaba a su mayor ritmo en varias décadas.

Según el IBGE, por sectores, la expansión económica en el tercer trimestre fue impulsada principalmente por la agropecuaria, cuya producción creció un 0,7 % en la comparación con los tres meses anteriores, mientras que los servicios crecieron un 0,5 % y la industria un 0,4 %, su primer resultado positivo en el año.

"Pese a que la agropecuaria presentó la mayor tasa de crecimiento, fueron los servicios los que más influyeron en el resultado trimestral, ya que el sector tiene un mayor peso en el PIB", según Palis.