El humorista español Quequé trae a México "lo peor" de su carrera
Con el estómago lleno de comida local y el deseo de no hacer dobles sentidos involuntarios, el humorista español Héctor[…]
Con el estómago lleno de comida local y el deseo de no hacer dobles sentidos involuntarios, el humorista español Héctor de Miguel, conocido como Quequé, trae por primera vez sus monólogos a México, con un espectáculo en el que ha recopilado, dice, "lo peor" de su carrera.
En el hotel Four Points de la capital Quequé presentará, con el tono calmado e irónico que le caracteriza, los "grandes fracasos de su carrera" a los mexicanos y al grupo español afincado en la ciudad, apunta en una entrevista con Efe.
Sus actuaciones los próximos 1 y 2 de abril tratarán los temas recurrentes de su carrera, que ya se extiende por casi veinte años, como la pareja, el amor, la política, la muerte o el paso del tiempo.
"Los monologuistas somos muy poco originales con los temas que tratamos, como debe ser por otra parte, porque al fin y al cabo tratamos temas universales", afirma el cómico.
A su llegada a México, en la que también es su primera visita a nivel personal, se ha dado cuenta de que la capital es un sitio en el que constantemente se reciben "inputs de cosas muy locas".
Y aunque todavía no ha tenido tiempo para empaparse del todo con el humor local, asegura que con el tema de la comida ha "avanzado bastante".
"Quería ponerme a prueba por el estómago para ver qué tal respondía y lo ha hecho muy bien, incluso a las huevas de hormiga", relata, explicando que no ha caído en la habitual "venganza de Moctezuma" que sufren los extranjeros porque "comía mal en España" y su estómago ya se ha acostumbrado a todo.
Reconoce que ha pedido asesoramiento a algunos mexicanos para sustituir las palabras que no se entiendan y para tener cuidado con los "giros locales".
"Creo que me va a costar mucho evitar el verbo coger", señala el humorista sobre un hecho que va a ser "inevitable", por la frecuencia con la que se usa esta palabra en España.
Quequé abrirá el ciclo "Stand Up de Estrellas del Humor Español", que prevé traer a figuras de este formato cómico a tierras mexicanas.
En España, hace unos años el programa televisivo "El Club de la Comedia" revivió el género de los monólogos, desencadenando un auténtico "boom", que ya se calmó, o en sus propias palabras, "ya bajó el suflé".
"Por lo que me han contado, en México están con ese 'boom', pero reposará", augura el cómico, para quien en momentos como estos aparece "esa sensación de que el monólogo lo puede hacer cualquiera, de que cualquiera puede subirse a un escenario, pero no es tan fácil".
Además, actualmente "estamos en un momento en el que la corrección política lo inunda todo y cualquier cosa que digas es susceptible de que el público proteste", por lo que ha tomado la decisión de que en sus monólogos hará lo que tenga que hacer, "y si alguien se ofende, lo siento muchísimo".
Esta tendencia se agudiza con las redes sociales, con las que Quequé, quien se define en su cuenta de Twitter como "actriz y modelo", mantiene una relación "amor-odio".
"Somos la primera generación que las sufre o las disfruta, así que estamos pagando todas las novatadas", sostiene en relación a las situaciones de linchamientos virtuales que los famosos tienen que soportar.
Pone como ejemplo al portero Iker Casillas, quien fue duramente criticado en su última etapa en el Real Madrid: "Primero te da un Mundial y una Eurocopa, es el héroe de España y al año siguiente es un maldito... eso nos divierte mucho en España, elevar a alguien y una vez que está en lo más alto... ¡pam!".
Aunque sostiene que no basa su humor en "querer escandalizar", los políticos no quedan libres de sus pullas.
Ironiza también sobre la situación actual en España, donde se han cumplido cien días sin Gobierno por la falta de acuerdos tras las últimas elecciones generales.
"No veo que vaya mal, peor que antes no estamos (...) yo lo dejaría así, al no haber Gobierno, no corres el riesgo de que gobierne alguien como Donald Trump", comenta.
Entre todos los políticos españoles, el ahora presidente en funciones, Mariano Rajoy, es "absolutamente insuperable, porque me hace reír sin querer", señala.
"Solo oír a Rajoy decir 'buenos días' a mí me hace reír", algo que se agudiza "cuanto más serio y más solemne se pone", y cuando lanza algunos de sus conocidos "lapsus", como cuando dijo "ETA es una gran nación", afirma el humorista.
.