¿Cómo reaccionará el mercado a las elecciones del 28 de abril? Esto es lo que piensa Julius Baer
¿Cuáles son los resultados que pueden arrojar las urnas? y, más importante todavía, ¿cómo va a digerir este resultado el mercado?
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció la celebración de elecciones anticipadas el próximo 28 de abril, después de que el Parlamento rechazase el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2019. La cita electoral se celebrará después de Semana Santa y un mes antes de las elecciones al Parlamento Europeo y las elecciones municipales y regionales españolas, evitando juntarlas todas en un "superdomingo" electoral.
Pero, ¿cuáles son los resultados que pueden arrojar las urnas? y, más importante todavía, ¿cómo va a digerir este resultado el mercado? Las opciones están muy abiertas y ni tan siquiera los politólogos más expertos se atreven a hacer predicciones muy cerradas. En cuanto a los analistas del mercado, ya hay alguna casa que se ha atrevido a enviar unas pinceladas sobre el tema. Un ejemplo es Julius Baer, que dice lo siguiente: "Las encuestas indican un Parlamento fragmentado, en el que ningún partido tiene capacidad de formar mayorías, Pero los giros en las políticas de los partidos podrían permitir que se forme un gobierno de coalición de centro-izquierda o de centro-derecha. Una coalición de centro-derecha formada por el Partido Popular, Ciudadanos y VOX, como la que recientemente se ha formado en Andalucía, es probable que fuera precavida con el gasto, pero al mismo tiempo buscaría nuevos recortes de impuestos y también devolvería al primer plano el tema de la independencia de Cataluña", dice una nota enviada por la compañía
Por el contrario, "es probable que una coalición de centro-izquierda que incluyese al PSOE (Partido Socialista Obrero Español) y Podemos aumentase el gasto social, lo que no sería percibido positivamente por los mercados, ya que los déficits presupuestarios aumentarían", añade el documento.
En todo caso, el crecimiento de España sigue "siendo fuerte y el país puede soportar cierta inestabilidad política", según Julius Baer. "Sin embargo, cualquier tensión política duradera podría ser motivo de preocupación para los inversores y las agencias de calificación, ya que podría representar una amenaza para la reforma de la sostenibilidad de la deuda", dice el informe.
En ese sentido, se podría producir una mayor compresión entre el diferencial de los bonos gubernamentales a diez años de España y Portugal, que actualmente es de 30 puntos básicos. "Esperamos una mayor compresión, ya que el interés de los títulos del gobierno español podría ampliarse a raíz de los acontecimientos políticos, mientras que los bonos del gobierno portugués deberían reducir el interés a medida que el Banco Central Europeo reequilibre su cartera de bonos del gobierno y reinvierta los fondos de los bonos que van venciendo con flexibilidad. Es decir, no necesariamente en los países donde se originaron los bonos vencidos".