Allianz cierra su fondo de impacto. ¿Qué señal lanza?

La gestora Allianz cierra su primer fondo de impacto. Esto, ¿qué consecuencias puede tener para los inversores?

Allianz Global Investors anuncia el primer cierre de su fondo de inversión de impacto “Allianz Impact Investment Fund” (AIIF), tras el éxito logrado con los primeros inversores institucionales de Alemania, Escandinavia y Austria.

Se espera que el cierre final tenga lugar en el último trimestre de 2020.

Este cierre se produce apenas seis meses después del lanzamiento del vehículo, que tuvo lugar en 2019.

El cierre de un fondo, que implica que no admite más aportaciones, puede tener una doble lectura.

Por un lado, desde el punto de vista de la rentabilidad es una buena noticia para el inversor, puesto que el gestor se preocupa de cumplir el objetivo de rentabilidad y menos por los ingresos por comisiones.

De hecho, este es el caso del fondo de Allianz tal y como señalan. “Para no diluir las perspectivas de rentabilidad  ha establecido el objetivo de su primer fondo de impacto en 200 millones de euros y con un límite máximo de 300 millones de euros”.

En el primer cierre, los inversores ya han suscrito alrededor de un tercio del importe máximo del fondo.

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No obstante, desde el punto de vista del activo en el que se invierte no está tan claro puesto que el gestor, al acometer esta acción, no encuentra buenas ideas de inversión.

Sobre el primer cierre, Martin Ewald, gestor de cartera de inversiones de impacto, comentó que este primer cierre del fondo en menos de 6 meses reafirma que los clientes buscan asignar capital con la intención de lograr un resultado definido y medible en lugar de solo uno financiero: el contribuir al desarrollo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Características del fondo

El Allianz Impact Investment Fund es el primer fondo multiactivo de impacto para el mercado privado lanzado por Allianz Global Investors.

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 Su objetivo consiste en aprovechar el potencial del sector de la inversión de impacto, en rápida expansión y con un valor de 502.000 millones de dólares en el ámbito mundial.

"Las inversiones de impacto son una de las formas más relevantes de inversión que generan retornos financieros sostenibles y atractivos y tienen un impacto positivo en el medio ambiente y la sociedad", explica Beatrix Anton-Grönemeyer, directora de sostenibilidad.

“Nuestros equipos pueden aprovechar la amplia gama de oportunidades e implementar las nuevas tendencias de manera profesional y en una etapa temprana”, añadió.

El fondo, denominado en euros y que fue lanzado en septiembre de 2019, invierte en activos y deuda de mercados privados, así como en otros fondos (fondo de fondos) de sectores como la eficiencia energética.

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También el uso sostenible de la tierra y la agricultura, que generen una serie de impactos sociales o medioambientales medibles junto con retornos financieros y con un enfoque geográfico de inversión en Europa.

Este tipo de inversiones intentan dar una respuesta a las peticiones de los inversores institucionales que buscan que sus inversiones generan un impacto medible, positivo y que contribuyen a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.

Con el fin de garantizar que los objetivos de sostenibilidad se ejecutan según lo planificado, se reportará (durante todo el periodo de vida de 10 años del fondo) de manera regular ante un Consejo de Impacto independiente -que también incluye a algunos inversores seleccionados- sobre el progreso y el desarrollo de las inversiones relevantes y también se informará a todos los inversores. El impacto alcanzado se comparará con los objetivos iniciales de cada proyecto en informes trimestrales y se comunicará de manera transparente a los inversores.

Un modelo de constante crecimiento

Las inversiones de impacto o de impacto social son aquellas que desde su planteamiento tienen el objetivo de beneficiar a la sociedad y o al medioambiente.

 No se trata de filantropía ni de donaciones a fondo perdido, sino de inversiones que buscan un retorno de capital como mínimo igual al invertido, pero que deben producir de manera intencionada, cuantificable y medible un impacto positivo en el planeta

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Dicho de otro modo, si no hay impacto no hay inversión.

El Pacto Mundial de las Naciones Unidas define las inversiones de impacto como “la colocación de capital en empresas sociales y otras estructuras con la intención de crear beneficios sociales y medioambientales más allá del rendimiento financiero”.

En ese sentido, son los inversores institucionales los que más buscan este tipo de inversiones, que están en línea con los principios de inversión socialmente responsable.

 

 

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