Javier Romero: "Las comisiones no te arruinan, quien pierde es porque ha hecho algo mal"
Empezó en los mercados a los 16 años, cuando todavía había que mirar las cotizaciones en el periódico, y desde entonces, Javier Romero no ha parado de aprender. Tras realizar un master en Finanzas y pasar por Merrill Lynch, aterrizó en el Instituto BME donde ha sido operador, profesor y supervisor. En esta entrevista reconoce que muchos inversores se buscan la ruina por querer ganar dinero demasiado rápido.
Empezó en los mercados a los 16 años, cuando todavía había que mirar las cotizaciones en el periódico, y desde entonces, Javier Romero no ha parado de aprender. Tras realizar un master en Finanzas y pasar por Merrill Lynch, aterrizó en el Instituto BME donde ha sido operador, profesor y supervisor. Lleva operando veinte años y dirige su propia empresa de formación, Optimo Trade, que planea revolucionar la enseñanza en video.
¿Está el mercado muy difícil con tantas máquinas?
El trading algorítmico está solo en el muy corto plazo, pero no lo hay en gráficos diarios ni en gráficos de 30 minutos o de una hora. Aquí el inversor si tiene su hueco, y de hecho, quien no lo tiene es el trading algorítmico, una máquina no está una hora esperando a ver cómo cierra una vela para operar.
¿Qué recomienda a los inversores que empiezan?
Lógicamente, empezar con la formación, leer libros, hacer algún curso, operar con una cuenta demo y, sobre todo, tener mucha constancia y mucha disciplina. El problema que tienen muchos particulares es que pretenden ganar mucho dinero con lo poco que tienen. Hay mucha gente que pretende conseguir un 100 por cien de lo que invierten y eso conlleva muchísimo riesgo. Partiendo de la base de que estos inversores saben hacer trading, su experiencia matemática es positiva pero pequeña, y con tanto riesgo acaban en la ruina. Yo recomendaría tratar de entender que cuentas pequeñas dan rentabilidades pequeñas.
¿Qué tipo de trading prefieres?
Uno es el 'position' trading, al que considero como inversión o como un estilo de inversión en el que tienes que ver los fundamentales de la empresa y por qué inviertes en ella; aquí, el técnico lo usas para buscar el momento de la entrada. Esto es el 80 por ciento de tu dinero, no lo puedes perder, es tu patrimonio. Un segundo estilo es el 'swing' trading, en el que puedes emplear el 15 por ciento de tu inversión y suele ser con productos apalancados, para multiplicar tu poder de compra. Esto te permite tomar posiciones a dos o tres semanas vista, normalmente con gráficos diarios. Y aunque sea con productos apalancados, si consigues un 6 por ciento de rentabilidad, nada te impide que este dinero no pase a tu cartera de largo plazo. No soy partidario del intradía, pero si de un 'quick' trading o rápido, con gráficos de una hora y posiciones a uno y tres días. Cuando haces solo intradía, el tomar la decisión de salirte tiene una carga emocional fuerte.
¿Se puede vivir del trading?
Yo creo que sí, pero no es fácil y necesitas una serie de requisitos. Lo primero es que te hacen falta unos ingresos recurrentes. Nos vamos a olvidar del 'day trading', pero un 'swing trading' lo puedes compaginar con tu trabajo sin ningún problema y tienes de sobra con dedicarle media horita a analizar gráficos por la noche y sacarte un buen sobresueldo. Si ya te refieres a dejar tu trabajo y operar, es otra cosa. Tener que hacer trading sabiendo que tienes que pagar las facturas es algo que emocionalmente nos supera; el problema llega en el momento en que tengas un mes malo, y no porque lo estés haciendo mal sino porque el mercado está errático.
¿Qué rutina sigues para operar?
Lo primero que miro son los futuros americanos, esto es fundamental, y luego, a las ocho de la mañana, cómo está el Dax y los principales pares de divisas que tengo visualizados. Por ejemplo, ahora mismo me gusta el dólar/dólar canadiense, el dólar neozelandés/ franco suizo y el euro/libra. Lo que más hago es 'quick trading', y mi recomendación es seguir tres o cuatro valores y sabértelos de memoria. Luego, ya a las nueve, miro cómo abren los índices y miro mis indicadores y a las diez ya tengo todo analizado. Como no estoy en trading intradía, no tengo presión. De hecho, yo opero en gráficos de una hora a vela vencida.
¿Qué importancia das al análisis técnico?
Cuanto más a corto plazo operes, más importante es el análisis técnico, porque menos importa el sesgo de largo plazo. Por ejemplo, para operar en el dólar canadiense, lo miro a medio plazo porque voy a operar a favor. Con esta divisa llevo operando tres semanas en gráficos de una hora y solo por técnico.
¿Hasta qué punto es importante el 'value'?
Sí es importante, pero para el estilo de trading de posicionamiento, no para un 'swing trading', donde sería mejor una empresa que esté fuerte y que haya hecho una pequeña corrección para coger tú el siguiente impulso. Mejor coger para el 'swing trading' empresas fuertes, con medias móviles crecientes y buscar pequeñas correcciones.
¿Qué es la doble media exponencial?
Las medias móviles habituales llevan mucho retraso en el precio y no suelen generar buenos cruces. Hay unas medias móviles avanzadas, como la doble exponencial (la utilizo de nueve sesiones), que se adaptan mucho mejor al precio y generan mucho menos ruido, con lo que sus cruces son muy fiables. Esta se combina con otra media que detecta muy bien cuándo el mercado está lateral y esta es la media móvil adaptativa (KAMA o de Kauffman, de diez sesiones).
¿Qué otros indicadores te gustan?
Me gusta todo, y no me gusta nada (risas). Ninguno funciona si lo usas de manera recurrente, y todos funcionan si los usas en el momento adecuado. Por ejemplo, me gusta mucho el MACD, pero en concreto, los cruces al alza o a la baja en torno al eje cero, cuando se está rompiendo una línea de tendencia de grado inferior a la tendencia principal, es decir, cuando hay una pequeña consolidación. Me gusta el estocástico cuando dentro de una formación triangular o de consolidación quiere aprovechar y coger los soportes o resistencias. Pero el estocástico no se debe usar cuando el precio está en tendencia. En tendencia, hay que usar las medias móviles. Las Ondas de Elliott las uso pero para el largo plazo, porque en gráficos de 15 minutos no se pueden sacar impulsos. También utilizo Fibonacci, pero como herramienta de apoyo a la hora de tomar decisiones, nunca como señal de trading.
¿Qué hay en tu cartera de inversión?
Tengo una cartera de medio y largo plazo. Un 50 por ciento lo tengo en España, y reconozco que en su momento me equivoqué. Nunca he hecho largo plazo, pero hace unos siete años, me hice una cartera de largo plazo, y ahora tengo 'blue chips' buscando rentabilidad por dividendo. También tengo Apple, Google, o Red Hat. Además, cuando consigo generar algo de dinero, me estoy metiendo en algunos fondos de renta variable, de gestoras como Magallanes o Bestinver, que han demostrado ser consistentes. Con eso, me quito un peso de encima. Y luego me dedico al 'swing trading' y al 'quick trading'.
¿Qué te parecen los CFDs?
Me gustan, porque dan acceso a los pequeños inversores a productos que no podría conseguir vía futuros. Pero hay que tener cuidado con el coste de financiación, aunque cuando un inversor pierde y echa las culpas a las comisiones, es que no lo ha hecho bien. Las comisiones no te arruinan. Tampoco te mata el apalancamiento, lo peor es que te fallen las operaciones. El CFD es un producto para operar como mucho a una o dos semanas pero no más.
¿Importa mucho la psicología?
La psicología de trading es importante. El problema es que hay mucha gente que apuesta mucho dinero porque quiere ganar lo antes posible. La gente se relaja demasiado porque quiere ganar cuanto antes, pero no es culpa del CFD. No se si hablar de ludopatía o la adrenalina de saber que puedes ganar dinero con un 50 por ciento de probabilidades. Esto tienes que controlarlo, y se controla haciendo un plan de trading.
¿Cómo ves al Ibex 35?
Soy optimista. Cuando el Dax supere los 12.500 se puede abrir un impulso y el Ibex podría superar los 9.800 o 9.900 puntos.