Israel ataca a Irán: ganadores y perdedores del nuevo avispero geopolítico
El ataque de Israel a Irán desata la corrección en las bolsas. Estos son los ganadores y perdedores del nuevo cisne negro del mercado
El ataque de Israel a las instalaciones nucleares de Irán hizo saltar por los aires la calma de la que disfrutaba el mercado tras amainar la tormenta de los aranceles.
Los inversores más curtidos en bolsa saben bien que casi todos los veranos tienen su cisne negro, ese acontecimiento inesperado que dinamita los parqués, y algo parecido ha sucedido con el ataque israelí.
Los bombardeos contra instalaciones nucleares y de misiles balísticos de Irán provocaron una subida del petróleo de hasta el 9%, el mayor incremento en tres años, la peor de las noticias para el control de la inflación, y por ende, para los bancos centrales, enfrascados en neutralizar los efectos de los aranceles de Donald Trump.
Las caídas que se vieron este viernes en las bolsas fueron transversales, afectando prácticamente a todos los sectores, lo que responde de un “clásico patrón de aversión al riesgo”, dijo Matthew Haupt, gestor de cartera en Wilson Asset Management.
La respuesta de Irán a Israel, clave a corto plazo
Ahora, la clave para los inversores a muy corto plazo pasa por la magnitud de la respuesta iraní al ataque de Israel. De momento, Irán ha prometido una respuesta severa, pero habrá que esperar al menos a que transcurra el fin de semana para ver cómo se desarrollan los acontecimientos.
“Ahora estaremos atentos a la rapidez y magnitud de la respuesta de Teherán. Eso marcará la duración de los movimientos actuales. A menudo, estos movimientos se diluyen tras el impacto inicial”, recordó Haupt.
Evidentemente, la tentación de comprar tras las caídas es grande, y como reconocen en Bankinter, esto “puede crear una oportunidad para que las bolsas se reajusten a la baja y, cuando la geoestrategia se estabilice, plantearnos comprar a precios razonables”.
No obstante, tomar una decisión inmediata sería demasiado precipitado, pues es necesario ver “cómo evolucionan los acontecimientos a lo largo de este fin de semana”, añadieron estos expertos.
Por ahora, la inflación en Europa está controlada, pero “lo realmente preocupante sería que los bonos de largo plazo rompieran niveles significativos al calor de la incertidumbre”, dijo a finanzas.com Alfonso Escárate, experto en gestión de family office y colaborador de la revista Inversión.
Aerolíneas y sector viajes, los mayores perjudicados
En la primera reacción al ataque, “el mercado castigó preventivamente a los valores expuestos al tráfico aéreo, en previsión de una disrupción en flujos internacionales o en costes operativos”, indicaron los analistas de GVC Gaesco.
En el IBEX 35, las caídas el viernes las lideraba IAG, con un descenso del 4%, mientras que en Europa, sus dos grandes rivales, Lufthansa y Air France-KLM, también cedían este mismo porcentaje.
Peor le iba a Wizz Air, que cedía el 5% y algo mejor a Ryanair, con caídas del 3%. Por efecto contagio, Amadeus retrocedía casi el 2% y Aena perdía del 1,5%.
Petróleo y defensa, los sectores ganadores
Todo lo contrario sucedió con las petroleas y las compañías del sector defensa, las más favorecidas por las noticias del ataque.
El petróleo llegó a dispararse un 9%, descontando todas las incertidumbres abiertas con la escalada del conflicto. “Los mercados deben incorporar una mayor prima de riesgo, dado el papel crucial de Irán en el suministro mundial de petróleo”, apuntó Francesco Pesole, analista de ING.
“El próximo riesgo clave es si nuevas escaladas provocan interrupciones en el estrecho de Ormuz, lo que podría afectar seriamente los flujos desde el golfo Pérsico, indicó este experto.
Repsol recogió estas expectativas con alzas del 1%, y lo mismo hicieron otras petroleras europeas, como BP o Total Energies, con alzas del 2%, o incluso del 3%, en el caso de Equinor.
Más comedida fue la reacción del sector defensa. Rheinmetall (+1,7%), BAE Systems (+2,8%), Dassault Aviation (+1,1%), Saab (+2,1%), Leonardo (+1,7%), Kongsberg (+2,0%), Thales (+0,6%) fueron algunos de los valores más beneficiados.
Transporte marítimo y lujo, otros sectores impactados
En la parte positiva, el sector del transporte marítimo también se vio favorecido, en la medida en que los ataques podrían encarecer los costes de esta actividad, lo que se trasladará a los precios.
Así, AP Moller Maersk, uno de los gigantes europeos, cotizaba ganancias del 2,6% mientras su rival Hapag Lloyd sumaba el 3,4% y Cosco repuntaba un 5%.
Por el contrario, las empresas del sector del lujo, ante las previsiones de caída de la demanda. En concreto, el sector en su conjunto corregía más de un 2%, con caídas del 1% para Puig, del 2% para LVMH, Hermés y Hugo Boss, y de hasta el 3% en el caso de Kering.
Finalmente, los productores de oro y metales preciosos de movieron al alza, al entender los inversores que el metal amarillo es un refugio seguro en tiempos inciertos.
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