UBS lo ve claro: "largos de oro, que tocará los 1.600 dólares"

Los analistas de UBS lo tienen claro: hay que tener posiciones largas (compradoras) en oro porque la guerra comercial entre China y Estados Unidos "se ha intensificado hasta un nuevo nivel", lo que hará que el metal precioso brille aún más por su condición de activo refugio. 

El oro se convertirá cada vez más en una apuesta ganadora a media que el enfrentamiento entre Estados Unidos y China perjudique el crecimiento, creando el riesgo de una desaceleración más profunda e invitando a una mayor flexibilización por parte de los bancos centrales, según UBS. 

De este modo, los economistas del banco suizo han incrementado las previsiones de precios, con una proyección de que el metal precioso podría llegó a 1,600 dólares en los próximos tres meses.

"La guerra comercial entre Estados Unidos y China se ha intensificado a un nuevo nivel", dicen Giovanni Staunovo y Wayne Gordon, analistas de la unidad de 'wealth management' de UBS, en un informe recibido. "El oro ha demostrado sus cualidades de refugio seguro y nos quedamos mucho tiempo con el metal, una operativa que iniciamos a mediados de mayo", aseguran estos expertos. 

En lo que llevamos de año, la cotización del oro se dispara alrededor del 25% y ha superado los 1.500 dólares la onza. De hecho, el viernes se produjo una escalada del 2%, hasta los 1.526 dólares, tras conocerse que China impuso nuevos aranceles a Estados Unidos por valor de 75.000 millones de dólares. La noticia fue seguida por una serie de comentarios por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien en su línea más dura, ha instado a las empresas estadounidenses a abandonar China lo antes posible. 

Tan claro como en UBS lo tiene uno de los gurús más reconocidos del mundo emergente, Mark Mobius, quien la semana pasada declaró a Bloomberg TV que "hay que comprar oro a cualquier precio". Su argumento es muy parecido al que manejan los economistas del banco suizo, pues está convencido que la cotización irá a más a medida que los bancos centrales flexibilicen todavía más sus políticas monetarias.