La retirada del billete de 500 euros, en cuestión

Los expertos ven la medida que estudia el BCE «poco efectiva» para luchar contra el blanqueo al no reducir el dinero en circulación

«Los billetes de 500 euros son vistos cada vez más como un instrumento de actividades ilegales, y es en ese contexto en el que estamos considerando acciones». Con estas palabras el presidente del BCE, Mario Draghi, confirmó hace pocas fechas que la institución se plantea la eliminación de estos polémicos billetes para luchar contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo. No es la primera vez que esta posibilidad está sobre la mesa, pero nunca se tomó tan en consideración la opción. Sin embargo, los expertos creen que esta medida, en caso de aprobarse, tendría más carácter mediático que real y ponen en cuestión su eficacia.

«Es una decisión más publicitaria que otra cosa. Esa no es la solución. El 'dinero negro' se llevará en billetes más pequeños», explica el profesor de Economía y Ética del IESE, Antonio Argandoña. En su opinión las grandes operaciones de blanqueo no se verán afectadas por esta medida, aunque reconoce que sí puede ser determinante para luchar contra el pequeño defraudador.

Tampoco considera que reducir el límite legal de pago en efectivo (actualmente en 2.500 euros) serviría para reducir el fraude: «si la intención es pagar en negro, da igual el límite que fije la ley». En su opinión, la solución está en la necesidad de que los gobiernos exijan una verdadera «transparencia» a todas las operaciones comerciales.

La mayoría de ciudadanos sólo conocen este billete por la televisión. Sin embargo, esta realidad choca con que España sea el país que tiene más billetes de alto importe y que en los años de apogeo de la burbuja inmobiliaria tuviera hasta un 25% de los que circulaban por la zona euro. De hecho, la evolución de este billete en España ha estado muy relacionada con la situación económica.

Con la entrada en vigor de la moneda única en 2002 había 14.296 millones de euros en billetes de 500 euros, una cantidad que suponía el 25,1% del total del dinero en circulación en el país, según los datos del Sindicato de Técnicos de Hacienda (Gestha). Sin embargo, ese volumen se fue incrementando hasta llegar a su máximo de 56.700 millones en 2007, es decir, en el momento de máximo esplendor del 'ladrillo'.

Pero con la crisis la cantidad comenzó a descender de forma gradual hasta los 34.104 millones de 2015. En cualquier caso, el retroceso resulta engañoso porque ese volumen de dinero representa el 75% del total en circulación en España.

El comercio, perjudicado

«Estos billetes en época de crisis sirven para ocultar patrimonio», resalta Juan Ignacio Sanz, profesor de Banca y Mercado de Valores de ESADE. Sin embargo, este experto también considera que retirar los billetes de 500 euros «no sería eficaz» para luchar contra el fraude porque su eliminación no reduce el dinero en circulación. Asimismo, Sanz cree que su supresión sería incluso «contraproducente» y generaría un 'mercado negro' para cambiar estos billetes por otros de menor cuantía.

Publicidad
Publicidad

Además, en su opinión la retirada de este billete favorecería a las entidades financieras porque obligaría a recurrir al dinero bancario y perjudicaría al comercio minorista. De hecho, el todopoderoso Bundesbank alemán ya se ha pronunciado en contra de esta medida que «demoniza» el impreso de 500 euros. Para justificarlo argumenta que la mayor parte de las operaciones comerciales de las empresas germanas se realizan en metálico.

Precisamente por este motivo Sanz explica que la solución para acabar con el fraude sería eliminar el dinero en efectivo, aunque «en el corto y medio plazo es muy improbable». De hecho, este escenario sólo sería factible si la mayor parte de la población tuviese posibilidades de acceder al dinero bancario, es decir, a tarjetas de crédito y a una cuenta abierta en una entidad financiera.

Sin embargo, la medida es aplaudida por los funcionarios de la Agencia Tributaria. «Su eliminación quitaría un instrumento para blanquear y dificultaría este proceso», explica el secretario general de Gestha, José María Mollinedo. En su opinión, estos billetes se han usado para «pagar parte en 'dinero B' de grandes operaciones» y recuerda cómo todas las tramas de corrupción desarticuladas contaban con importantes cantidades de estos billetes en maletines o bolsas de basura.

Publicidad

      Además, Mollinedo no cree que su retirada implique un efecto sustitución por billetes más pequeños, especialmente de 200 euros. Y considera que en caso de producirse ese relevo para encubrir posibles fraudes, se detectaría y actuaría.

En portada

Noticias de