La obra social argentina de jubilados comprará medicinas sin intermediación

El Gobierno argentino presentó hoy un convenio alcanzado con los laboratorios farmacéuticos por el que la obra social de los jubilados comprará las medicinas sin intermediación, con el objetivo de aumentar la competencia y reducir los costes.

En una rueda de prensa en Buenos Aires, el presidente, Mauricio Macri, anunció que el Programa de Atención Médica Integral (PAMI), que atiende a unos cinco millones de jubilados y es el principal comprador de medicinas del país, eliminará la intermediación de las cámaras empresariales del sector.

El mandatario expresó que se adopta así un modelo de "sana competencia", a través del cual se reducirán los precios que ofrecen las compañías, y se mostró confiado de que el nuevo sistema "claramente va a favorecer a la industria nacional.

Macri aseguró también que, desde su llegada al Gobierno a finales de 2015, las adquisiciones de medicamentos por parte del programa para los jubilados se han abaratado un 16 %.

La nueva regulación sustituye la firma de un convenio general del PAMI con la industria farmacéutica por acuerdos individuales con cada laboratorio con presencia en el país, un cambio que no modificará el modo en que hasta ahora los jubilados compraban sus medicinas.

Además, a través de acuerdo, PAMI podrá ofrecer medicamentos con su propia marca, cuya fabricación licitará entre todos los laboratorios.

El director del PAMI, Sergio Cassinotti, enfatizó que la competencia entre laboratorios "va a generar descuentos", y afirmó que con el nuevo convenio las farmacias recuperarán "el rol perdido en estos 22 años".

En la conferencia también estuvo presente Jorge Cassará, director del laboratorio Pablo Cassará, el primero del sector en firmar el acuerdo.

PAMI es el principal comprador de medicamentos de Argentina, ya que sus cinco millones de afiliados consumen el 40 por ciento del mercado.

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