La creación de empleo permitirá que el PIB avance el 3,2 % este año

El Banco de España ha elevado una décima su previsión de crecimiento para este año, hasta el 3,2 %, cifra[…]

El Banco de España ha elevado una décima su previsión de crecimiento para este año, hasta el 3,2 %, cifra que coincide con el cálculo del Gobierno y que la entidad cree que se apoyará en el dinamismo del consumo de los hogares, que se verá impulsado a su vez por la intensa generación de empleo.

En su informe trimestral de proyecciones macroeconómicas, la entidad también ha subido dos décimas la estimación de crecimiento para 2017, hasta el 2,5 %, lo que no altera las perspectivas de desaceleración del avance de la economía a partir del año próximo, propiciadas por el encarecimiento del petróleo y el abandono de una política fiscal expansiva.

Las previsiones abarcan también 2018 y 2019, años en los que se seguirá frenando el crecimiento y para los que el Banco de España calcula un avance del 2,1 y el 2 %, respectivamente.

Estas proyecciones para el periodo 2016-2019 presentan riesgos a la baja que provienen fundamentalmente del contexto exterior, dada la incertidumbre acerca de rumbo de las políticas económicas globales, especialmente en Estados Unidos, y ante las diversas citas electorales en países del euro.

En el ámbito interno, y una vez que el Gobierno en plenas funciones ha comenzado a tomar decisiones fiscales, el Banco de España considera que las mayores dudas están en si se promoverá una agenda de reformas estructurales que aumenten la productividad y dinamicen el funcionamiento de los mercados de bienes y servicios.

Asimismo señala que los ajustes presupuestarios podrían tener como consecuencia un menor dinamismo de la actividad a corto plazo, aunque está de acuerdo en que la prioridad es reducir las vulnerabilidades asociadas al alto nivel de déficit y deuda pública, y a las cuantiosas necesidades financieras de la nación frente al exterior.

En lo que respecta al déficit público, la entidad prevé que este año se sitúe en el 4,4 % del PIB, con lo que se cumpliría holgadamente el objetivo fijado por Bruselas en el 4,6 % del PIB, gracias al aumento de los pagos adelantados por las grandes empresas a cuenta del impuesto de sociedades.

Para 2017 calcula que el déficit solo bajará hasta el 3,6 % del PIB, pero avisa de que esta previsión no tiene en cuenta las medidas tributarias aprobadas por el Gobierno el pasado 2 de diciembre para asegurar unos ingresos tributarios suficientes para cumplir con el 3,1 % del PIB comprometido.

Publicidad
Publicidad

El empleo continuará subiendo a lo largo de todo el periodo a tasas elevadas, similares a las del crecimiento económico, de forma que aumentará el 3 % en 2016 y el 2,3 % en 2017.

La entidad espera que la población activa vuelva a aumentar al final del horizonte de proyección, con lo que el crecimiento del empleo conducirá a descensos continuados de la tasa de paro que bajará al 19,6 % en 2016, al 17,7 % en 2017, al 16,3 % en 2018 y al 15 % en 2019.

La intensa generación de puestos de trabajo será importante para el dinamismo del consumo de las familias durante el periodo, ya que -según el Banco de España- los hogares gastan en una proporción mayor si el aumento de su renta procede de la creación de empleo que si tiene su origen en un incremento del salario.

Publicidad

La inversión residencial se verá también estimulada por la evolución favorable del mercado de trabajo y de las condiciones aplicadas, tanto a la compra de vivienda como a la promoción y la construcción.

La inversión empresarial irá moderando ligeramente su dinamismo a lo largo del periodo en línea, con el comportamiento menos expansivo de la demanda, pero sin que la disponibilidad o el coste de la financiación supongan un obstáculo para el gasto de las empresas.

En portada

Noticias de