El saldo vivo de cédulas hipotecarias cayó un 0,3 % en junio
El saldo vivo de las cédulas hipotecarias emitidas, tanto de las cédulas singulares como de las multicedentes, registró en junio[…]
El saldo vivo de las cédulas hipotecarias emitidas, tanto de las cédulas singulares como de las multicedentes, registró en junio un ligero descenso del 0,3 % en tasa interanual, hasta situarse en 209.238 millones de euros, según los datos de la Asociación Hipotecaria Española (AHE).
Los datos de la AHE indican que el saldo vivo de los bonos de titulización hipotecaria experimentó también un retroceso, del 12,7 %, desde los 121.446 millones de euros de junio de 2017 hasta los 105.987 millones del ejercicio actual.
El saldo en circulación de los títulos hipotecarios a junio de 2018 ascendía a 315.225 millones de euros, un 6,6 % menos que el año anterior, y desde 2012 la cartera presenta una tendencia descendente, con niveles que fluctúan en mayor o menor grado, dependiendo del año de referencia tomado, indica la AHE.
El Banco Central Europeo (BCE) sigue manteniendo el tono expansivo de su política monetaria no convencional, pese a haber iniciado la retirada de parte de sus estímulos, fijando el volumen de compras de su programa de expansión cuantitativa (QE, por sus siglas en inglés) en las economías de la eurozona desde enero hasta septiembre de 2018 en 30.000 millones de euros mensuales.
Según anunció el Consejo del BCE en un comunicado el pasado mes de junio, entre septiembre y diciembre el volumen de compras disminuirá hasta los 15.000 millones mensuales, dando por concluido todo estímulo a partir de dicho momento, siempre que le acompañe un ajuste sostenido de la senda de la inflación.
Aun así, la institución contempla mantener la intervención en el mercado a través de la reinversión de los valores adquiridos que vayan venciendo, prosigue la AHE.
Es de esperar que el avance hacia la normalización de la política central provoque una mayor actividad, recobrando importancia este tipo de financiación a medida que los títulos de deuda vayan venciendo, pero el impacto de las medidas adoptadas por el BCE seguirá marcando el devenir del mercado de renta fija.
