PP Menorca pide nueva ronda para negociar la zonificación alquiler turístico

La presidenta del PP de Menorca, Misericordia Sugrañes ha instado hoy al Consell a abandonar su propuesta de zonificación del alquiler turístico y a abrir una nueva ronda de negociaciones para buscar "una solución consensuada, estable y de futuro".

Según ha informado el PP de Menorca, tras la comisión de alcaldes celebrada hoy en Ferrerias, Sugrañes ha declarado que "Susana Mora ha escogido una norma que no quiere nadie, con división hasta en el gobierno del Consell".

Asimismo, la presidenta del PP ha considerado necesaria una "reacción rápida", debido a la voluntad que comparten Consell y oposición de aprobar la norma en el pleno de febrero. "No podemos dilatar más la moratoria actual", ha asegurado Sugrañes.

Ante la prohibición que propone el proyecto del Consell en cuanto al alquiler turístico en la totalidad de las viviendas en suelo urbano tradicional, bajo el argumento de proteger el acceso a la vivienda de los residentes, la presidenta del PP ha afirmado: "Estamos seguros que las viviendas plurifamiliares suponen suficiente bolsa para atender el mercado del alquiler residencial".

En este sentido, Sugrañes ha argumentado que los ayuntamientos pueden introducir restricciones adicionales sobre la zonificación que apruebe el Consell. De este modo, afirma, si algún ayuntamiento quisiera restringir más el alquiler en núcleo urbano, lo podría hacer "sin perjudicar a los demás".

Por otra parte, Sugrañes ha acusado a la presidenta del Consell de establecer excepciones en base a intereses partidistas, en referencia a las salvedades que incluye la propuesta del ejecutivo de Menorca en seis núcleos urbanos considerados de "vocación turística" y que, en consecuencia, sí podrán hacer uso del alquiler de vivienda vacacional.

"Aquí al único que le dejan tener autonomía municipal es a Fornells porque curiosamente es el presidente del PSOE", ha sentenciado la presidenta del PP insular.

Finalmente, la representante de los populares ha tendido la mano al Consell para abrir una nueva mesa de negociación que permita " buscar un acuerdo general que permita luego a los ayuntamientos restringir aún más, si ese es el modelo de ciudad que quieren para sus vecinos".

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