La deuda autonómica disminuye por primera vez desde el inicio de la crisis
En el tercer trimestre cae tres décimas hasta el 24,6% del PIB, aunque el pasivo del conjunto de las administraciones bate récord con 1,107 billones
El elevado endeudamiento público es uno de los principales riesgos para la economía española como señalan los organismos internacionales y expertos en todos sus informes. Un problema que también reconoce el propio Gobierno. Por eso la gran novedad de los datos publicados este jueves por el Banco de España fue que el pasivo de las comunidades autónomas en el tercer trimestre se redujo en relación al PIB por primera vez desde el inicio de la crisis. En concreto, estos números rojos se situaron en el 24,6% del PIB, lo que supone tres décimas menos que el dato registrado entre abril y junio. Hay que remontarse hasta el tercer trimestre de 2007 para encontrar un descenso en este índice.
En concreto, la deuda autonómica se situó en los 271.980 millones de euros, lo que también supone una ligera disminución de 841 millones en valor absoluto del pasivo respecto al trimestre anterior, algo que no ocurría desde 2008. Sin embargo, esta reducción es una gota de agua en un océano plagado de más endeudamiento. De hecho, en lo que va de año el pasivo regional se ha incrementado en 9.437 millones. Es decir, la disminución trimestral hay que tomarla con mucha cautela para saber si se trata de algo coyuntural, debido a unos vencimientos más tardíos, o se trata de un verdadero punto de inflexión.
De momento, por volumen absoluto el mayor pasivo lo registra Cataluña (74.400 millones), Valencia (43.194) y Andalucía (32.316). La situación varía un poco al analizar la deuda en relación al PIB, que sitúa en primer lugar a Valencia (41,6%), seguido de Castilla-La Mancha (35,9%) y Cataluña (35,6%). Por contra, el nivel más bajo lo registra Madrid (14,2%), después País Vasco (15,2%) y Canarias (15,8%).
Hay que destacar que la mitad de la deuda autonómica ya está en manos del Estado como consecuencia de los mecanismos de financiación extraordinarios como el FLA o el Plan de Pago a Proveedores.
En cualquier caso, el oasis de las comunidades no impidió que la deuda del conjunto de las administraciones públicas se situara en el 100,3% del PIB en el tercer trimestre del año al alcanzar la cifra récord de 1,107 billones de euros. Una cantidad que se ha incrementado en 1.379 millones entre julio y septiembre y que, además, parece pequeña comparada con los 34.000 millones de aumento del pasivo en los nueve primeros meses de 2016. Una tendencia alcista que dificulta cumplir el objetivo del Gobierno de cerrar el año en el 99,8%. De hecho, instituciones como la Comisión Europea o el FMI prevén que acabe superando la barrera psicológica del 100% (antes de la crisis apenas suponía el 35%). Las previsiones enviadas a Bruselas contemplan que el pasivo se sitúe en el 99% en 2017 y retroceda al 97,7% en 2018.
La mayor parte de los números rojos corresponden al Estado con un pasivo de 806.414 millones (excluyendo préstamos a otras administraciones) equivalente al 73% del PIB, lo que implica una pequeña reducción respecto a los tres meses anteriores (73,6%). Precisamente, el único argumento del Ejecutivo para confiar en una mejora se encuentra en el mayor crecimiento económico. Y es que un mayor avance del PIB reduce el ratio de la deuda, algo que ya sucedió en 2015.
Mejora de los municipios
Por su parte, la deuda de las corporaciones locales alcanzó los 34.657 millones en el tercer trimestre, lo que equivale al 3,1% del PIB. Son 448 millones menos que en el segundo trimestre. Sin embargo, los ayuntamientos han logrado que su disminución se prolongue durante los nueve meses del año y alcance los 474 millones. Esta reducción se produce gracias al superávit de la administración local, una variable que permite compensar el desfase del Estado y las comunidades. La clasificación del endeudamiento municipal está liderada por Madrid con 4.471 millones, que ha reducido un 2% su pasivo.
Por último, la Seguridad Social registró un saldo positivo de 5.358 millones en el primer trimestre. El dato favorable se debe a que computan los 22.531 millones aún existentes en el Fondo de Reserva. El problema llegará cuando se agote esta hucha al final del próximo año, según la estimación del Gobierno.