El TJUE dicta sentencia mañana por el retraso de España en reformar la estiba
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) dictará mañana una segunda sentencia sobre el incumplimiento de España de[…]
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) dictará mañana una segunda sentencia sobre el incumplimiento de España de la reforma del sector de la estiba, tras un primer dictamen de diciembre de 2014 por el que España arrastra una multa de cerca de 25 millones de euros.
En aquella primera condena, el TJUE impuso a España una sanción de 27.522 euros diarios por cada día en que persistiera la infracción denunciada por la Comisión Europea (CE) por no liberalizar la estiba en línea con la normativa comunitaria.
Ante la falta de la reforma española, a pesar de la sentencia, la CE abrió un segundo procedimiento de infracción por el que solicitaba a la corte de Luxemburgo una segunda multa de 134.107,2 euros por día transcurrido desde la publicación de la sentencia mañana hasta la reforma legislativa española.
El Gobierno redactó un primer decreto ley para reformar la estiba, que fue rechazado en el Congreso de los diputados el pasado mes de marzo.
Sin embargo, la cámara baja sí aprobó un segundo decreto el pasado 18 de mayo, con 174 votos a favor (PP, Ciudadanos, PNV, UPN y Foro Asturias) y 8 abstenciones (PDECat).
Bruselas dijo entonces que entendía que España se ajustaba así a las normas de la Unión Europea, por lo que recomendaría al TJUE "congelar" la segunda multa.
Si la corte de Luxemburgo, ante la que no cabe recurso, acepta los argumentos de la Comisión Europea, España se libraría de la segunda multa de 134.107,2 euros diarios ya que es la cantidad que debía abonarse entre la sentencia de mañana y la reforma de la estiba española, y el Gobierno ya ha llevado a cabo la revisión legislativa.
Durante todo el período de tramitación parlamentaria de la reforma, y también después de aprobado real decreto, el sector ha vivido casi cinco meses de huelgas y protestas.
Hasta que el pasado 29 de junio sindicatos, liderados por la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar (CETM), y la patronal Anesco alcanzaron un "principio de acuerdo" que contemplaba la subrogación de los estibadores portuarios actuales como preludio de un nuevo convenio colectivo y que aplacó el conflicto social del sector.
La patronal garantizó de ese modo el empleo antes de los ajustes de plantilla y los sindicatos se comprometieron a garantizar la estabilidad de los puertos, que habían visto mermada su actividad por los paros.
El entendimiento logrado entre las partes, que seguirán negociando hasta lograr un acuerdo total, llevó al gremio de los estibadores a desconvocar las cinco jornadas de huelga que iban a llevarse a cabo mañana el 30 de junio y los días 3, 4, 6 y 7 de julio.
El Ministerio de Fomento, del que es titular Íñigo de la Serna, celebró el consenso entre patronal y sindicatos, que todavía tienen pendientes negociaciones sobre aspectos como la formación y acceso al mercado de los trabajadores.