Acerinox deja en el aire su próximo dividendo

Acerinox no da una nueva fecha para su junta de accionistas en la cual debía aprobarse un dividendo de 0,4 euros por acción a pagar el 8 de junio

Acerinox deja en el aire su próximo dividendo al no dar una fecha para celebrar su junta de accionistas, suspendida el 14 de abril y que debía haberse celebrado el día 22 de este mes, en la cual tenía previsto aprobar una retribución al accionista de 0,4 euros por acción.

La compañía, con motivo de la presentación de resultados del primer trimestre, informa a sus accionistas que la nueva fecha se comunicará cuando las circunstancias actuales cambien y haya una claridad en los mercados y el negocio.

Acerinox considera que dicha decisión es un “ejercicio de responsabilidad” hacia la propia compañía, sus accionistas, sus trabajadores, clientes y proveedores “y hacia la sociedad española en su conjunto”.

Falta de visibilidad

Acerinox reconoce la falta de visibilidad que el coronavirus provoca sobre su negocio y, por ello, aseguran que no pueden “pretender” dar una visión futura más allá del corto plazo.

Dentro de ese espacio de tiempo la compañía se agarra a los 1.475 millones de euros de liquidez que la permiten “anticipar que la compañía va a salir reforzada para el futuro”.

La acerera no esconde que el mercado de inoxidable está “gravemente afectado” por la pandemia y la dificultad para realizar unas previsiones reside en que la repercusión del virus no es homogénea entre continentes o países vecinos, “lo que dificulta tremendamente la visibilidad en un mercado global como el nuestro”.

En el más corto plazo comunican, según una información relevante remitida la CNMV, que reanudarán su actividad en Malasia y Sudáfrica el mes que viene, en España solo pararon cuatro días, y esperan trabajar a un 65% de capacidad en el segundo trimestre.

Es ahí donde reconocen que se producirá “un impacto en la cuenta de resultados”, pero no cuantifican el daño y apuntan a que están “intensificando” la reducción de costes.

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Bajo esa premisa, se revisan las inversiones previstas “aplazando las que no son estrictamente necesarias y optimizando las necesidades de capital circulante”.

A su vez, pide a los gobiernos y empresas que se animen a replantearse “la necesidad de contar con una industria potente que garantice los suministros básicos”.

Reconoce el impacto del Covid-19 en el primer trimestre

Acerinox reportó una caída de beneficios de enero a marzo un 14% inferior al mismo periodo de 2019, hasta los 28 millones de euros.

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Un trimestre que se vio lastrado en los últimos días de marzo por el Covid-19, ya que hubo “una recuperación inicial de la actividad en todos nuestros mercados”.

El ebitda fue un 6% inferior en tasa interanual, 85 millones de euros, pero un 15% superior al último trimestre de 2019. El importe total es provocado, explica Acerinox, tras realizar un ajuste de inventario negativo por valor de 16 millones de euros.

La facturación también se resiente levemente, un 4% respecto al primer trimestre del curso pasado, hasta los 1.159 millones de euros. El motivo es  “los menores extras de aleación durante el trimestre”.

La compañía cuenta con un  ‘cash flowh’ libre de -36 millones de euros al verse impactado por unas mayores necesidades de capital circulante de explotación de 65 millones de euros y el pago de la externalización del ERE en Acerinox Europa por importe de 26 millones de euros.

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Los pagos por alta de inmovilizado han ascendido a 23 millones de euros, mientras que el pago por la compra de VDM ha ascendido a 313 millones de euros. Así, el total de pagos por inversiones ha sido de 337 millones de euros.

La compañía esgrime que en estos resultados no están incorporados aún los obtenidos por VDM durante el trimestre, habiéndose formalizado la adquisición en marzo después de haber recibido las autorizaciones de las autoridades de competencia europeas y estadounidenses.

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