ELA reivindica su "derecho y obligación" a "influir" en la política

El secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, Txiki, ha afirmado hoy que este sindicato seguirá defendiendo su "derecho y obligación" de "influir en la política", y ha criticado al Gobierno Vasco, el PNV y a los empresarios por reaccionar de forma "muy dura" ante lo que dice y hace esta central.

ELA ha celebrado hoy en Bilbao su principal manifestación con motivo del Primero de Mayo, en la que ha reunido a miles de personas -11.000, según el sindicato- bajo el lema "No más políticas antisociales".

El sindicato ha concedido el protagonismo del acto a las trabajadoras de las residencias de ancianos de Bizkaia, que llevan más de 150 días de huelga, repartidos a lo largo de los últimos 14 meses, en demanda de mejoras laborales y asistenciales.

Ataviado con una camiseta verde, identificativa de las empleadas de las residencias en huelga, Txiki Muñoz ha alzado, junto a algunas de estas trabajadoras, una pancarta de grandes dimensiones en las que se recordaba la "lucha" que se lleva en estos centros y se decía, en euskera, "no a la precariedad".

En un posterior discurso, Muñoz ha subrayado que, ante las críticas que recibe del Gobierno Vasco, el PNV y el mundo empresarial, "ELA establece su propio pensamiento, sus propuestas en materia laboral, social y política con plena autonomía. Lo ha hecho y lo va a seguir haciendo".

"Molesta al poder económico y político que ELA dé perspectiva de reivindicación y lucha a la clase trabajadora contra las injusticias sociales; molesta sobremanera que el sindicato ponga sus medios, como la caja de resistencia, al servicio de la lucha contra la extensión de la miseria laboral", ha añadido.

Según Muñoz, "nadie del PNV acusa de 'injerencia'" a la patronal vasca, Confebask, "cuando ésta pide al PNV que vote a favor de los presupuestos de Rajoy".

Ha dicho que el "reto" de ELA es "evitar que la alianza entre gobiernos y poder económico deteriore las identidades colectivas de clase", por lo que ha subrayado que van a seguir defendiendo su "derecho, y obligación, de influir en la política" para defender aquello en lo que creen.

En alusión al mercado de trabajo, ha remarcado que "ELA no acepta el desastre causado por dos reformas laborales brutales" y que "no ve el fondo del agujero en cuanto a la extensión del trabajo indigno".

El secretario general de ELA ha criticado a los sindicatos UGT y CCOO y a la patronal española, "de la que forma parte Confebask", por pretender "estatalizar la negociación colectiva", lo que, a su juicio, "uniformiza a la baja" las condiciones de trabajo y "empobrece" a la gente.

Muñoz ha llamado a los trabajadores a organizarse -"si la gente se organiza, se puede", ha dicho- y ha advertido de que se preparan más reformas, una laboral, que "piden el FMI, el Banco de España, la patronal...", y la de las pensiones.

Ha defendido de nuevo la unidad de acción con LAB, al entender que hay una "imperiosa necesidad de que el trabajo en común" ese sindicato "sea una realidad y tenga efectividad en la negociación colectiva, las propuestas sociales y el proceso soberanista".

En relación con la huelga en las residencias, Txiki Muñoz ha denunciado el "desprecio institucional" de la Diputación de Bizkaia y ha dicho que las trabajadoras de estos centros "tienen condiciones de trabajo peores porque son mujeres".

Además de Muñoz, también ha pronunciado un discurso Soraya García, empleada de una de las residencias, que ha subrayado que las trabajadoras irán "hasta el final, hasta lograr de una vez por todas que ase dignifiquen" sus condiciones de trabajo y las "condiciones de vida" de los usuarios de las residencias.

Posteriormente, las miles de personas congregadas por ELA han marchado en manifestación por la Gran Vía bilbaína desde la plaza del Sagrado Corazón hasta el palacio de la Diputación vizcaína, donde han finalizado el acto.

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