Saudí Aramco vuelve a retrasar su OPV

El anuncio de la salida a bolsa de Saudí Aramco, en lo que será una de las mayores colocaciones de la historia, tendrá que esperar. Y es que el gigante petrolero saudí ha retrasado el proyecto al menos unas semanas más, en medio de las dudas sobre la valoración de 2 billones de dólares que pretende el príncipe saudita Mohammed Bin Salman, informa Bloomberg. 

El aplazamiento permitirá que los banqueros de Wall Street que asesoran a Aramco incorporen los resultados del tercer trimestre en sus valoraciones previas a la salida a bolsa de la compañía, según fuentes informadas sobre la situación. Los bancos todavía están luchando por cumplir con la valoración que busca la compañía, insisten las mismas fuentes. 

Aramco, que bombea alrededor del 10% del petróleo mundial, na indicado en un comunicado que el momento de la OPV dependerá de las condiciones del mercado y ha asegurado que continúa colaborando con los accionistas en actividades relacionadas con la cotización. 

La repentina demora interrumpe el plan cuidadosamente pensado para lanzar la venta de acciones el 20 de octubre, seguido una semana después de una intensa promoción durante el gran foro de inversión del país, denominado Davos del desierto, y que debería haber terminado con la OPV a finales de noviembre. Ahora, es poco probable que la petrolera se estrene como mínimo hasta diciembre, o más bien ya en enero. 

El año pasado, Aramco retrasó la salida a bolsa después de más de dos años de preparativos, ya que los inversores internacionales se opusieron a la valoración del príncipe heredero de 2 billones de dólares. Esta vez, Arabia Saudí optó por una alternativa más sencilla, decidiendo que la compañía comience a cotizar en el mercado local de Riad (abandonando los planes para una venta en Londres o Nueva York) y reclutando bancos locales y familias adineradas para apoyar la OPV.

Con todo, el gobierno saudí ha mostrado su determinación de seguir adelante con la empresa, pese al ataque con drones que sufrieron dos refinerías de Aramco a mediados de septiembre, lo que obligó a un ingente esfuerzo por recuperar la producción perdida en un tiempo récord. 

Ahora, el problema que emerge para que se materialice el estreno tiene que ver con la valoración de la petrolera. Si bien los detalles no se han hecho públicos, las fuentes involucradas en la transacción apuntan que alrededor del 2% de Aramco podría venderse por unos 40.000 millones de dólares, superando así los 25.000 millones de dólares recaudados en 2014 con la salida a bolsa del gigante chino del comercio electrónico Alibaba. Claro que muchos analistas han dicho que los 2 billones de dólares que pretende Mohammed Bin Salman  es demasiado dinero en comparación con compañías similares que cotizan en bolsa.