Podemos cree que el déficit de 2015 demuestra que la austeridad ha fracasado

Podemos ha considerado hoy que el déficit público del 5,16 % a cierre de 2015 muestra que "las políticas de austeridad han fracasado" y ha recalcado que continuar con los objetivos impuestos por Europa es una pretensión "irreal" y "contraproducente" para la recuperación económica y el empleo.

En un comunicado, la formación propone una reforma fiscal y luchar contra el fraude para afrontar el problema de ingresos que padece la economía española, al tiempo que opina que las CCAA no pueden "ahogarse" con objetivos de déficit más estrictos sin que se resientan los servicios sociales.

A juicio del secretario de Economía de Podemos, Nacho Álvarez, el incumplimiento sistemático de los objetivos de déficit durante todos los años del Gobierno del PP "demuestra que estas previsiones se alejan de las necesidades y la situación real de la economía española".

Además, ha advertido a PSOE y Ciudadanos de que "esta cifra de déficit no puede ser utilizada como excusa para cercenar la agenda social de un posible Gobierno de Cambio".

Por su parte, CCOO ha recalcado que la reforma fiscal y la bajada de impuestos fue un "objetivo electoral" del PP que ahora "hipoteca al país y al futuro gobierno", que tendrá que enfrentarse a un importante ajuste fiscal.

Para el sindicato la desviación de las cuentas públicas obedece, fundamentalmente, a una caída de la recaudación derivada de la "improcedente" reforma fiscal llevada a cabo por el Gobierno (de entre 9.000 y 12.000 millones), que produjo una merma de ingresos "estructurales y muy necesarios".

Además, achaca la fuerte desviación en la Seguridad Social al envejecimiento de la población y la devaluación salarial, que ha reducido las cotizaciones pese al aumento del empleo.

También ha reaccionado al dato el sindicato de funcionarios CSI-F, que asegura que no aceptará que la desviación del déficit implique nuevos recortes y reclama un acuerdo en materia de Administraciones públicas que permita controlar el déficit público y mejorar la gestión.

Su propuesta es el establecimiento de un mínimo acuerdo sobre reglas de gasto, transparencia, regeneración democrática y buenas prácticas en la gestión de las administraciones y las inversiones, para evitar los errores que nos han conducido a la crisis económica.

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