Pídale la luna a su banco

Está claro que los banqueros juegan al despiste y que, en muchas ocasiones, lo que dicen en sus comparecencias públicas es justo lo contrario de lo que muestra la realidad o tienen en mente hacer. Emilio Botín lo ha hecho en varias ocasiones negando el interés en compras que posteriormente cierra o en realizar ampliaciones de capital que al final acaba lanzando. En la actualidad, no sólo Santander, sino también BBVA trata de dar una imagen errónea y confusa a los ahorradores. Ambos se niegan en afirmar que han entrado en la brutal batalla por la captación de pasivo que se libra en el ámbito bancario. Pero lo cierto es que los depósitos que ofrecen a través de sus sucursales figuran entre los más agresivos del mercado.

En ambos casos, eso sí, están empleando estrategias de "camuflaje". Sus ofertas no están publicitadas en sus vistosos escaparates ni aparecen en prensa. Pero entrando a una oficina, el usuario puede comprobar que los comerciales están dispuestos a hacerle una buena oferta con tal de que no se marche con las manos vacías. Están cerrando depósitos que alcanzan el 4% en el caso del Santander y pueden superar esta cuantía en las oficinas de BBVA. En esta última entidad, la mejor remuneración es, precisamente, para los clientes que demuestren que traspasan sus saldos desde su competidor directo, el banco de Emilio Botín.

La práctica choca, sin embargo, con las declaraciones de sus directivos. Hoy mismo, Ángel Cano, consejero delegado de BBVA, ha dicho en el XVII Encuentro del Sector Financiero, organizado por Deloitte, ABC y la Sociedad de Tasación, que no entran en la "guerra del pasivo" porque no lo necesitan. En cierto modo, no quiere levantar recelos entre sus actuales clientes, para los que las remuneraciones por renovar sus depósitos no alcanzan ni la mitad de lo que ofrecen a los nuevos.

Pero lo cierto es que en varias sucursales representativas de Madrid nos confirman que la semana pasada recibieron una directriz interna por la que están autorizados a ofrecer imposiciones a plazo de forma personalizada y negociada con los clientes y que pueden dar tipos de hasta el 4% o incluso algo más si el ahorro procede del Santander y si el usuario se vincula y aporta saldos elevados a la entidad. En una sucursal, el propio director me comentaba que está extrañado con la instrucción porque no es la estrategia habitual de BBVA, que nunca ha entrado en las batallas por captar pasivo de forma tan contundente. "Pero parece que esto es la guerra y toca ser agresivos", añaden.

Si lo desea, compruébelo usted mismo acercándose a una oficina. Los comerciales tienen la orden de tratar a un posible cliente como un rey. Le sacarán la alfombra roja y le ofrecerán la luna. Es buen momento para negociar y, quizás, para cambiar de banco.