No me creo nada

Lamento ser tan negativo en estas fechas dadas al relax y al divertimento, pero no me creo nada. Ni los[…]

Lamento ser tan negativo en estas fechas dadas al relax y al divertimento, pero no me creo nada. Ni los "brotes verdes" (si acaso, se intuyen en Estados Unidos, pero no antes de final de año), ni los 10.000 del Ibex (con escaso volumen y fiados a noticias también increíbles), ni los "magníficos" resultados de algunas compañías y bancos norteamericanos...

 No veo posible que esto aguante. Estamos lejos de haber superado el temporal. El dinero público ha acudido masivamente al rescate pero, además de acabarse, ha dejado en peligrosa herencia unos déficits masivos que antes o después habrá que reconducir. Las empresas siguen sin liquidez, el consumo continúa sin repuntar... Estamos apagando el incendio con gasolina: los desmanes causados por el dinero barato, el apalancamiento disparatado y el exceso de endeudamiento no se pueden combatir poniendo más y más dinero en el sistema.

 Veremos cómo acaba el año la bolsa española. Yo creo que ya hemos visto los mínimos, pero también los máximos. Además, el curso difícil será el próximo... teniendo en cuenta que empieza en septiembre. En España lo peor de la crisis de los bancos y, sobre todo, de las cajas, llegará a la vuelta del verano. Y la economía española no tiene nada parecido a "brotes verdes", sino más bien hierbajos de efímera vida.

 El 2009 está siendo complejo y duro, pero el año de la verdad va a ser el próximo. E, insisto, háganse a la idea de que comienza después del verano. El 2010 va a ser mucho más complicado que el 2009. Por eso, no se confíen, no se lancen a invertir con prisas, reduzcan su endeudamiento, ahorren, háganse a la idea de que hay que seguir con el cinturón apretado... No se crean nada. Y menos que nada lo que dicen los políticos. Ni los del Gobierno ni los de la oposición. Están al corto plazo (unos a conservar el poder, otros a esquivar a los tribunales), no se enteran de lo que está pasando en la economía y, aun en el hipotético caso de que se enteraran de algo, no parece interesarles más que su propia supervivencia en sus cómodos escaños.

En portada

Noticias de