Navarro vuelve a la escena pública con su llegada a Consorcio de Zona Franca
El exalcalde de Terrassa y exprimer secretario del PSC, Pere Navarro, regresa al escenario público como delegado especial del Estado[…]
El exalcalde de Terrassa y exprimer secretario del PSC, Pere Navarro, regresa al escenario público como delegado especial del Estado en el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB), después de cuatro años apartado del foco tras su etapa como líder del socialismo catalán entre 2011 y 2014.
Navarro, de 58 años, toma el relevo de Jordi Cornet al frente del CZFB, entidad pública que tiene como actividad principal gestionar el polígono industrial de la Zona Franca, así como administrar sus activos y favorecer la proyección internacional de Barcelona, Cataluña y España en los sectores ferial, logístico e inmobiliario.
El nuevo responsable del Consorcio trabajaba hasta ahora en Idencity, una consultora con sede en Barcelona, presidida por el exalcalde Jordi Hereu, dedicada a ayudar a las ciudades y territorios a iniciar y desarrollar el camino hacia la competitividad y la sostenibilidad.
Navarro ha dedicado la mayor parte de su trayectoria a la vida política, primero como concejal y alcalde de Terrassa y después como líder del PSC y diputado en el Parlament.
Licenciado en Biología, empezó a militar en el PSC en 1977, cuando aún no tenía la mayoría de edad, y fue uno de los fundadores de la Juventud Socialista de Cataluña en Terrassa.
Fue en 1987 cuando fue escogido regidor en el Ayuntamiento de su ciudad, en el que ocupó diversas concejalías, como la de Urbanismo, Cultura o Participación Ciudadana y Juventud, hasta que en 2002 accedió a la alcaldía en sustitución del también socialista Manuel Royes. Estuvo en el cargo casi once años.
Político de carácter afable y conciliador, tomó las riendas del PSC en diciembre de 2011 con el reto de reconstruir un partido que acababa de perder en 2010 la Generalitat a manos de CiU.
Como relevo de José Montilla y abrigado por el partido, afrontó el reto de estar en la primera línea de la política catalana sin renunciar a su tono conciliador y discreto, aunque se encontró con un clima político muy influido por el debate independentista, que tensó las costuras del PSC.
A Navarro le tocó así lidiar con un proceso soberanista que iba "in crescendo" y la reivindicación de una consulta soberanista que dividió a sectores del PSC.
Defendió siempre una reforma constitucional de corte federal como la solución para el encaje de Cataluña, pero su posición no fue compartida por algunas voces más soberanistas del partido, hasta el punto de que tres de ellos, Marina Geli, Núria Ventura y Joan Ignasi Elena, se saltaron la disciplina del grupo parlamentario y votaron 'sí' a la propuesta de los partidos soberanistas de pedir al Congreso competencias para convocar un referendo.
Navarro apartó a los tres diputados díscolos de la ejecutiva y de sus cargos en el grupo parlamentario, pero tras este incidente dimitieron varios miembros de la federación de Girona.
Las luchas internas entre los más favorables a la consulta y los que abogaban por una reforma constitucional fueron, junto con los resultados electorales que el PSC cosechó en los comicios al Parlamento Europeo de 2014, desencadenantes de la dimisión de Navarro como primer secretario del partido, en junio de 2014.
Alejado de la vida política pero siempre presente en foros destacados como las sesiones del Círculo de Economía, Pere Navarro fichó el pasado año por la consultora Idencity como director de Desarrollo Estratégico.
La empresa, que opera en Barcelona desde 2011, asesora a ciudades en aspectos como el desarrollo y la transformación territorial o la implantación de planes estratégicos de desarrollo económico sostenible y ha trabajado en proyectos de mejora de la gestión pública en ciudades de Latinoamérica y España como San José (Costa Rica), Barranquilla (Colombia) o Chalco (México).