Las empresas familiares toleran mejor la crisis, según un estudio de la UdG

Las compañías familiares catalanas han sobrevivido mejor a la crisis, según un estudio de supervivencia empresarial en Cataluña que comprende el periodo 2006-2016 y que ha presentado hoy la Cátedra Cámara de la Universidad de Girona (UdG).

El análisis constata que la desaparición de firmas ha sido más alta en el ámbito de la construcción, seguido del sector manufacturero, mientras que el de servicios es el que ha sorteado mejor esa década de dificultades económicas.

El estudio se ha basado en una muestra aleatoria de 629 empresas catalanas, de las que 421 eran familiares, y ha analizado su evolución durante esos diez años.

Del total, 457 permanecen activas en la actualidad, 317 de ellas familiares, lo que supone un 27,3 por ciento de cese de actividad en ese periodo.

El informe también confirma que esa desaparición de compañías aumenta a medida que crece la dimensión en número de trabajadores y que la antigüedad influye igualmente.

Así, la disolución de las empresas examinadas por este estudio de la Udg es mayor en las de menos de diez años y en las de más de cuarenta.

Lleida es la provincia que presenta una mayor desaparición de compañías, seguida de Barcelona, Tarragona y, por último, Girona, algo que la directora de la Cátedra Cámara, Pilar Marquès, atribuye al elevado porcentaje en esta zona de firmas familiares (74,2 por ciento), enfocadas al sector servicios y de menor dimensión.

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