Grupo Indukern facturó 725 millones en 2016, un 4 % menos

El grupo químico-farmacéutico Indukern cerró el año 2016 con una facturación de 725 millones de euros, lo que representa un 4 % menos que en el año anterior, si bien su previsión es volver a crecer a "un dígito" en 2017.

En rueda de prensa, el vicepresidente ejecutivo del grupo, Raúl Díaz-Varela, ha detallado que el grupo alcanzó un beneficio bruto de explotación o Ebitda de 56,6 millones, cifra ligeramente inferior a los 60 millones obtenidos en 2015.

El directivo ha sostenido que se trata de unos buenos resultados, pese al retroceso en las ventas que se produce después de nueve años de crecimiento.

El grupo Indukern, que este año cumple 55 años, está controlado por la familia Díaz-Varela y lo forman tres empresas con filiales en 17 países: la química Indukern, la farmacéutica Kern Pharma y el laboratorio veterinario Calier.

Del total de ventas del 2016, el 47 % proceden del mercado nacional y el 53 % del extranjero, donde el grupo prevé reforzar su presencia en 2017, con Latinoamérica y EEUU en el punto de mira.

El vicepresidente ejecutivo ha detallado que el retroceso en la facturación de 2016 se debe al cambio de estrategia en la filial química, cuya facturación ha caído un 15 % en el último ejercicio, hasta los 429 millones.

Esta disminución, ha continuado, responde a un cambio de estrategia que ha implicado "sacrificar" ventas en segmentos en los que el margen de beneficio era muy pequeño, en beneficio de otros de elevado valor añadido, a lo que se ha sumado la desinversión en Rusia, la bajada de precio en algunas materias primas y la afectación del cambio de divisas, especialmente del real brasileño.

La cara opuesta a esta disminución es el crecimiento "significativo" experimentado por Kern Pharma, que incrementó sus ventas en un 16 %, hasta los 240 millones, y Calier, que mejoró su facturación en un 6 %, hasta los 74 millones.

De cara al 2017, para lograr el crecimiento previsto, Díaz-Varela ha destacado que habrá que esperar a ver cómo se consolidan las adquisiciones y ventas que el grupo ya ha hecho en 2017.

Concretamente el grupo compró hace poco Actafarma, desde Kern Pharma, y en enero la mexicana Cytecsa, desde Indukern, mientras que se ha desprendido de su filial en Turquía, donde seguirá teniendo presencia comercial.

Además de estas adquisiciones, el grupo prevé repetir los 25 millones de inversión que ya efectuó en 2016 para impulsar el I D y mejorar sus instalaciones.

Concretamente, siguen las obras en la planta de Calier en León, con las que la compañía quiere lograr unas instalaciones punteras en el desarrollo de biológicos para uso animal, y también en la planta de Kern Pharma de Terrassa (Barcelona), donde se están reformando los laboratorios y construyendo otros nuevos.

La actual plantilla del grupo, que vende sus productos en 80 países, asciende a 1.696 trabajadores, 1.234 de los cuales trabajan en España, donde el año pasado se crearon 60 nuevos empleos.

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