Gobierno presenta un presupuesto de 2.621 millones que no aprobará a tiempo
El Gobierno de Cantabria ha remitido hoy al Parlamento y entregado a sindicatos y patronal un presupuesto para 2017 de[…]
El Gobierno de Cantabria ha remitido hoy al Parlamento y entregado a sindicatos y patronal un presupuesto para 2017 de 2.621 millones que irá acompañado de una subida de impuestos, aunque no entrará en vigor a tiempo, el 1 de enero, lo que obligará a prorrogar las cuentas de este año.
El presupuesto crece un 6,3 por ciento -un porcentaje equivalente a 157 millones-, si se compara con el de este año 2016 incluyendo los gastos financieros y un 3,6 si solo se tiene en cuenta el gasto real.
El Gobierno de coalición PRC-PSOE ha calificado el presupuesto de "expansivo" e inversor, porque prevé partidas para generar actividad económica y empleo, aunque también suben los presupuestos de las consejerías mas sociales, como sanidad y educación.
El proyecto irá acompañado de una reforma fiscal recogida en la ley de acompañamiento que prevé una subida del impuesto de patrimonio a 3.000 contribuyentes; de transmisiones, que pasará de un 8 a un 10 por ciento, y de algunos tramos del impuesto de sucesiones, si bien este documento no será entregado a los grupos parlamentarios y a los agentes sociales hasta esta tarde o mañana.
El consejero de Economía, Juan José Sota, ha defendido que la subida es mínima y responde a la filosofía de que pague más quien más tiene y más gana y a la intención del Gobierno de enviar el mensaje al Gobierno de España de que la propia comunidad autónoma también contribuye con su esfuerzo a financiar los servicios públicos.
Tanto el presidente de Cantabria, el regionalista Miguel Ángel Revilla, como la vicepresidenta, la socialista Eva Díaz Tezanos, han destacado que se trata del mejor presupuesto posible en las actuales circunstancias y han hecho hincapié en la complejidad que ha supuesto elaborar un presupuesto sin conocer datos claves, como el techo de gasto o el objetivo de déficit.
El Gobierno de Cantabria ha entregado esta mañana el documento a los agentes sociales en la Mesa General del Diálogo Social y se lo ha remitido a los grupos de la oposición, en los que la coalición PRC-PSOE tiene que buscar apoyos para sacar adelante las cuentas, ya que está en minoría en el Parlamento.
Revilla ha dicho que espera que a partir de ahora se abra un periodo de reflexión para articular en el Parlamento una mayoría para sacar adelante los presupuestos.
El Gobierno da por hecho que el presupuesto no podrá entrar en vigor el 1 de enero, como había ocurrido siempre hasta ahora desde el primer Ejecutivo de coalición PP-PRC, en 1995, por lo que no aprobará el documento en Consejo de Gobierno hasta que concluyan las negociaciones en el Parlamento y los agentes económicos y sociales realicen sus aportaciones.
De momento, los sindicatos UGT y CCOO han avalado las líneas generales de los presupuestos tras escuchar las explicaciones del Gobierno en la Mesa General de Negociación, mientras que CEOE, que no se pronunciará hasta que no conozca el documento, sí ha anticipado que se opone a una subida de impuestos y ha defendido un presupuesto inversor.
Los grupos de la oposición, a los que el Gobierno responsabiliza de que el presupuesto no se pueda aprobar a tiempo por haber rechazado el calendario propuesto para su tramitación, han criticado que se les haya remitido el documento tarde e incompleto.
Además, atribuyen el retraso en la aprobación del presupuesto a la incapacidad del consejero de Economía, Juan José Sota, en el caso de Podemos y Ciudadanos, y a las disputas internas que han mantenido los socios de Gobierno para cerrar las cuentas, en el caso del PP.
El secretario general de CCOO, carlos Sánchez, también ha apuntado esta mañana que el Gobierno podía haber cerrado el documento antes.
Según la oposición, la documentación no contiene la Ley de Medidas Fiscales y Financieras (de Acompañamiento) y carece de las memorias descriptivas de los programas de gasto y sus objetivos anuales; del estado de gastos; y de un anexo, de carácter plurianual, de los proyectos de inversión pública, entre otras cuestiones, lo que ven "ridículo y una falta de respeto".
El presidente del PP, Ignacio Diego, ha asegurado que no recuerda "un ridículo igual" y ha afirmado que el presupuesto llega al Parlamento después de que cada consejero de la coalición haya estado "tirando del trozo de la tarta" que quiere que le corresponda y de semanas de discusiones delante de todos los ciudadanos.
Diego también ha criticado que parte del presupuesto se haya hecho publico en un medio de comunicación, una queja que comparten Ciudadanos y Podemos, que lo ve "inadmisible".
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