El déficit del Estado baja un 22% entre enero y abril, hasta 5.928 millones
El déficit del Estado acumulado en los cuatro primeros meses del año se situó en 5.928 millones de euros, una[…]
El déficit del Estado acumulado en los cuatro primeros meses del año se situó en 5.928 millones de euros, una cifra que supone una reducción del 22,2 % con respecto al mismo periodo de 2017 y que equivale al 0,49 % del PIB.
Según los datos de ejecución presupuestaria de abril publicados hoy por el Ministerio de Hacienda, en el primer cuatrimestre los ingresos del Estado crecieron un 9,4 %, mientras que los gastos lo hicieron un 5,6 %.
En términos primarios -es decir, excluidos los intereses de la deuda-, el Estado cerró abril con un superávit de 2.271 millones de euros, lo que equivale al 0,19 % del PIB y duplica el de 2017.
Hacienda también ha publicado hoy el déficit del conjunto de las administraciones públicas -excepto las corporaciones locales, cuyos datos aún no se conocen- del primer trimestre del año, que fue de 4.653 millones, un 20,8 % menos que en 2017 y equivalente al 0,38 % del PIB.
Si se incluye en el cómputo las ayudas a la banca -62 millones-, el déficit público alcanza los 4.715 millones, un 0,39 % del PIB.
En estos tres meses, la administración central registró un déficit del 0,42 % del PIB y las comunidades autónomas, del 0,12 %, mientras que los fondos de la Seguridad Social se anotaron un superávit del 0,16 % del PIB.
El detalle de la ejecución presupuestaria del Estado de abril refleja que los ingresos ascendieron a 60.615 millones de euros, un 9,4 % más que en los cuatro primeros meses de 2017.
Este repunte se debe principalmente al aumento del 9,3 % de la recaudación tributaria, hasta 53.912 millones.
Los ingresos por IVA subieron un 11 %, hasta 26.719 millones; los de IRPF, un 9,7 %, hasta 10.991 millones, y los del impuesto de sociedades, un 12,1 %, hasta 7.473 millones, debido a menores devoluciones e ingresos extraordinarios.
Los ingresos del impuesto de hidrocarburos se incrementaron un 3 % y los de las subastas de derechos de emisión de gases efecto invernadero, un 37 %.
En cambio, las cotizaciones sociales cayeron un 1,9 %, hasta 2.185 millones, debido a la sustitución de empleados con régimen de clases pasivas por otros con régimen de Seguridad Social.
En estos cuatro meses también aumentaron las rentas de la propiedad por los mayores dividendos del Banco de España y las rentas del dominio radioeléctrico debido a los retrasos registrados en 2017.
Mientras tanto, los gastos del Estado crecieron un 5,6 %, hasta situarse en 66.543 millones, principalmente debido a la mayor aportación a la Unión Europea por recursos de IVA y RNB, que aumentó un 25,7 %.
Las transferencias a otras administraciones aumentaron un 3,3 % en este periodo, sobre todo por las mayores transferencias a las comunidades autónomas como consecuencia de los mayores anticipos concedidos a cuenta de la liquidación de 2016.
En cambio, bajaron las transferencias a los fondos de Seguridad Social, los organismos de la administración central y las corporaciones locales.
En esos cuatro meses aumentó el gasto en formación bruta de capital (un 128,3 %) y en prestaciones sociales(3,4 %), los consumos intermedios (1,6 %) y remuneración de asalariados (0,3 %), mientras que los intereses de la deuda cayeron un 4,6 %, hasta 8.199 millones.