Los sindicatos acusan a Saint-Gobain de aplicar una política de represión

El comité de empresa de la fábrica de Avilés de Saint-Gobain ha acusado este viernes a la dirección de meter miedo a los trabajadores más vulnerables y de aplicar una política de represión de derechos fundamentales, que es lo que le ha llevado a convocar un calendario de paros en señal de protesta.

En un comunicado en respuesta al posicionamiento público de la dirección de la fábrica, el comité de empresa se pregunta cómo se consiguen la acreditaciones de "Top employer" que esgrime, "cuando en ningún momento es contrastado con la parte social".

"Ante las declaraciones de la empresa en los medios de comunicación, debemos decir que desde este comité estamos siempre abiertos a la negociación; está en su mano dar solución a este conflicto", dice en el escrito.

Los representantes de los trabajadores recalcan que es la empresa la que está incumpliendo "sistemáticamente" los acuerdos del centro laboral, el convenio colectivo y el estatuto de los trabajadores.

"Saint-Gobain, pregona en el exterior un establecimiento de condiciones laborales y en el centro de trabajo realiza todo lo contrario", denuncia el comité.

Asegura que en la Inspección de Trabajo se recogen en los últimos años una serie de denuncias por este motivo, "es más, sobre la consulta e información al comité tiene nada menos que siete requerimientos".

Está derivando tareas propias que llevan años realizándose en fábrica a empresas externas y "es la empresa la que tiene que buscar las medidas necesarias para mejorar la mala organización que está ejecutando en el centro y no ser la subcontratación y las horas extras las medidas para arreglar los problemas organizativos".

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