Bajan las comisiones por trasladar 'la cartera'
Cambiar de bróker la cartera de valores es ahora más barato, tras la entrada en vigor el 1 de octubre de una circular de la CNMV que limita las comisiones que se pueden cobrar por esta operativa.
Cambiar de bróker la cartera de valores es ahora más barato, tras la entrada en vigor el 1 de octubre de una circular de la CNMV que limita las comisiones que se pueden cobrar por esta operativa.
Los inversores están de enhorabuena. Por una vez, las comisiones que tienen que pagar a los intermediarios bursátiles que gestionan sus carteras rompen su tendencia 'al alza' y, en vez de subir, bajan. La causante de este descenso ha sido una circular aprobada en abril por la CNMV y que ha entrado en vigor este mes, con la que el supervisor pretende «corregir ineficiencias existentes en las tarifas de comisiones para el traspaso de valores» fijadas por las entidades que prestan servicios de inversión. A partir de ahora, la comisión por traspaso de una cartera de valores será un porcentaje del importe total de los valores traspasados, acompañado del establecimiento de un importe máximo, lo que según la circular, «garantizará la aplicación razonable del principio de proporcionalidad».
Hasta ahora, la mayoría de las entidades cobraban una tarifa por cada compañía en cartera que se quisiera trasladar, comisión que en muchas ocasiones alcanzaba los 30 euros.
Ángel Fernández-Albor, socio de Cremades & Calvo-Sotelo y catedrático de Derecho Mercantil, considera que esta circular «es muy importante porque fomenta la competencia entre las entidades depositarias. Hasta ahora había una especie de 'secuestro' de la clientela por parte de las entidades debido a la barrera de salida que suponía el traspasar valores de una cuenta a otra. Al racionalizar el peso económico de la operación, bajando las comisiones, el cliente pasa a ser 'libre' y abandona la 'prisión' en la que se encontraba».
Hasta el 1 de octubre era habitual que el coste por traspaso de cartera superara varias veces el coste que implicaba su venta. «En los casos más extremos la comisión de traspaso equivalía a 50 veces el coste que supondrían las comisiones de venta de la cartera», señala la circular. Ocurría lo mismo si se comparaba la comisión por traspaso con la de custodia, donde eran generalizadas «las tarifas en las que el coste de traspaso equivaldría a varias veces la comisión de custodia anual, en algún caso suponía el coste de la custodia durante más de 40 años».
Estas circunstancias, «carecen de lógica económica», en la medida en que al inversor le resultaba significativamente menos gravoso liquidar su cartera y realizar una transferencia del efectivo resultante a otra entidad, que ordenar el traspaso de sus valores a otra entidad de custodia, señala la CNMV.
Para Ángel Fernández-Albor esas comisiones, además de elevadas, «eran irracionales, desproporcionadas. No tenía nada que ver la comisión que se cobraba con la situación por la que se tarifaba. No tiene sentido que si un inversor quería vender su cartera pagara una comisión determinada y si quería trasladarla, que es teóricamente una operación más sencilla porque es un traspaso contable, la comisión fuera mucho más cara. No solo era un abuso de cara al cliente sino que era una situación restrictiva de la competencia entre las distintas entidades, lo cual es muy grave».
La CNMV va más allá y dice que la existencia de tarifas por traspaso de valores significativamente elevadas podría llegar «a constituir una vulneración de los derechos de los consumidores», ya que esas tarifas podrían «suponer un obstáculo al derecho del inversor a poner fin al contrato de prestación de servicios», e incluso podrían llegar a «identificarse como cláusula abusiva».
Por su parte, Gómez-Albor reconoce que, a partir de ahora, al inversor que tenga la necesidad o la conveniencia de cambiarse de una entidad a otra le será más sencillo y barato. «La nueva circular facilitará al inversor llevarse todos sus productos financieros de una a otra entidad con costes razonables».