8.800 puntos: la resistencia clave para pensar en los 9.000

La confianza no es mucha si nos atenemos a todas las reuniones precedentes en las que se ha dicho contra con la solución para la crisis europea. Y volvemos a escuchar las cuatro palabras que más dinero han costado en bolsa: "Esta vez será diferente". Lo único diferente que tenemos encima de la mesa es esta especie de ultimátum ¿autoimpuesto?, ¿mediático? en que se otorgaban de plazo hasta el día nueve para solucionar la crisis.

Aumentan los síntomas de debilidad

La jornada de ayer acababa con recortes generalizados, aunque no demasiado significativos, en la misma tónica que los últimos acontecidos. China ayer estaba en boca de todo el mundo por su revisión a la baja de sus perspectivas de crecimiento, y ello sea que pesaba sobre todo en Wall Street. En Europa los datos macroeconómicos siguen mostrando debilidad y aunque apenas hubo tensión en los mercados de deuda a pesar de la decisión del gobierno español de aumentar su objetivo de déficit los retrocesos fueron algo superiores.

Hora de la verdad y último soporte para un Ibex sin apoyo de los grandes

Nueva jornada de correcciones que se hicieron extensivas a todas las plazas, pero pasando especial factura a las bolsas de la eurozona. El sector bancario sigue sin levantar cabeza y ayer tuvimos otra demostración que Draghi mantiene la senda de su predecesor Trichet en el arte de provocar descensos en los mercados con sus discursos.