Ibex-35: Sesión de transición en la que se han respetado los mínimos de ayer
Jornada sin pena ni gloria para la bolsa española en la que los tímidos avances que se podían producir por la mejora tras el cierre de ayer en Wall Street finalmente no han cuajado y, tras la subasta de cierre, el selectivo apenas ha sumado un avance del 0,31%.
Se sigue palpando la tensión proveniente de la crisis de la deuda griega, hoy se ha alcanzado una rentabilidad superior al 20% en sus títulos a dos años, esto es una sentencia clara por parte de los mercados: la situación es insostenible para el país. A pesar de que los políticos siguen con declaraciones de que no se va proceder a la reestructuración, uno parece estar viviendo ya en la película de "el día de la marmota" con estas situaciones.
El mercado también pone en digestión la puesta en perspectiva negativa de la deuda en EE.UU., pero nos lo fían muy largo, ya que dan de plazo hasta dos años para llegar a una situación que implique la pérdida de la "AAA" de su deuda. De momento ello ha significado en la sesión de hoy un cierto fortalecimiento del euro frente al dólar tras la fuerte revalorización experimentada ayer por el billete verde.
Técnicamente el selectivo español no presenta cambios respecto a la jornada de ayer, ya que el rango estrecho y dentro de los límites del movimiento del líder simplemente apunta a un mantenimiento de la debilidad, ya que el cierre sigue por debajo de la directriz acelerada proyectada. Pero por lo menos no se han marcado nuevos mínimos respecto ayer y sí que ha sido notoria la disminución de volumen.
Se mantiene así de momento la espera para confirmar la pérdida de la referencia de soporte de los 10.375 puntos de una forma ortodoxa técnicamente y con los 10.080 puntos como siguiente punto clave. El rango de los 10.500-10.650 puntos sigue como resistencia a superar en el más corto plazo para validar cualquier rebote que a su vez debería ir acompañado de mayor volumen.
Las lecturas de los osciladores siguen avanzando en su sobreventa pero ello no es óbice para que las correcciones pudieran continuar las próximas jornadas ante la proximidad de las fiestas de Semana Santa.
