La estadística sopla a favor de los índices bursátiles y refuerza que el próximo año será positivo para la renta variable, con máximos históricos incluido para el S&P 500
Las bolsas siguen haciendo la digestión del cambio de sesgo de la Fed y del no acompañamiento del resto de bancos centrales. Esto es lo que les espera hasta el cierre del año.