Los portugueses podrían cobrar las extras en bonos del Tesoro

Según publica la prensa portuguesa, en concreto, el Diario Económico, el Fondo Monetario Internacional podría exigir dentro del paquete de medidas de austeridad que el Estado abone las extras de Navidad y verano a los trabajadores públicos en bonos del Tesoro. De ser así, los funcionarios del país recibirían ya en deuda pública la paga de Navidad. Según comenta el citado rotativo, éste sería un "regreso al pasado", ya que en 1983, año de la última intervención del Fondo Monetario Internacional en Portugal, ésta fue una de las medidas exigidas a cambio de la ayuda externa, aunque sólo se aplicó en la paga de Navidad y no en su totalidad, ya que un porcentaje se siguió abonando en dinero contante y sonante.

Con estas medidas propuestas por el FMI, se matan dos pájaros de un tiro: por un lado, el Estado se ahorra el abono de las pagas extraordinarias mientras que, por otro, se colocan entre los funcionarios los bonos que no consigan venderse en las subastas. Pero esto no deja de ser una perversidad: ya no son sólo los bonistas los que asumen el riesgo de ver reducido su patrimonio por invertir en una deuda sometida a un verdadero acoso que incluso los bancos locales se negaron a comprar; sino que se les obliga a los trabajadores a asumir con su salario, que les corresponde por derecho, los avatares y caprichos del mercado. Porque el rescate, como hemos visto en los casos de Grecia e Irlanda, no pone un suelo al valor de los bonos.

Los portugueses se están comenzando a dar cuenta de los peligros de adoptar el camino propuesto por la oposición conservadora, a la que no dolieron prendas a la hora de reconocer que prefería que gobernara el FMI antes que los socialistas. Con su apoyo al plan de austeridad que José Sócrates había consensuado con la Comisión Europea, puede que el país hubiera conseguido evitar el rescate y sus draconianas consecuencias. De ahí que no sorprenda que, según los últimos sondeos, está aumentando la intención de voto hacia los socialistas en detrimento de los conservadores.