Los activos digitales encandilan a los inversores institucionales
El 28 por ciento de los inversores institucionales ven en las criptomonedas "una oportunidad de inversión legítima"
Los inversores institucionales están ultimando sus estrategias tácticas para invertir en 2022 y contrarrestar las expectativas de inflación al alza, las subidas de los tipos de interés y una mayor volatilidad de las acciones, los bonos y las divisas.
Uno de sus principales objetivos es dotar de rentabilidad a los inversores después de más de una década marcada por los bajos tipos de interés y consideran que una forma de conseguirla es invirtiendo en activos alternativos y digitales.
Así se desprenda de la encuesta realizada por Natixis Investment Managers a 500 inversores institucionales, de los que el 84 por ciento invierte actualmente en capital riesgo, un 81 por ciento en deuda privada y un 81 por ciento en infraestructuras.
Además, consideran que, dentro de estos activos, los sectores más atractivos para invertir en 2022 serán la tecnología de la información, la atención sanitaria, las infraestructuras y la energía.
También muestran un creciente interés por los activos digitales. El 28 por ciento ya invierte en criptomonedas, y 4 de cada 10 cree que estos activos constituyen “una oportunidad de inversión legítima”.
Elevado riesgo
A pesar de la fuerte demanda de los activos privados, menos de la mitad de los encuestados cree que estos ofrecerán un refugio en caso de producirse una corrección del mercado, “dado el continuo ascenso de los mercados privados hacia máximos”.
El 69 por ciento teme que las instituciones hayan asumido demasiado riesgo en su búsqueda de rentabilidad.
Preferencia por la gestión activa
La alta volatilidad y la distorsión de las valoraciones hacen que la gestión activa sea la estrategia preferida por estos inversores, principalmente para aquellos que desean ser selectivos a la hora de hallar las mejores oportunidades y las mejores rentabilidades ajustadas al riesgo.
Tres cuartos de los encuestados afirman que sus inversiones activas han generado resultados superiores a los índices de referencia en los últimos 12 meses.
Los peores sectores para 2022
En su estrategia inversora para 2022, los inversores institucionales huirán de sectores relacionados con los mercados tradicionalmente defensivos, ya que “serán los más rezagados”. Según el 35 por ciento de los encuestados, el sector inmobiliario se quedará atrás, mientras que el 27 por ciento opina que lo mismo ocurrirá con el sector de suministros.
Creen que, en el actual escenario económico, las autoridades monetarias poseen las claves de la recuperación económica y que los desajustes en la oferta y la demanda, la inflación y las valoraciones distorsionadas de las acciones se deben a las medidas que estas han adoptado.
Casi 7 de cada 10 encuestados opinan que cuando los bancos centrales dejen de imprimir dinero, el largo ciclo bursátil alcista llegará a su fin, aunque “esto no ocurrirá el próximo año”.
Para Andrew Benton, responsable de Europa del Norte en Natixis IM, "en líneas generales, las instituciones aguardan el 2022 con optimismo. No obstante, la elevada volatilidad presente en el mercado bursátil, la creciente inflación y los tipos de interés mantienen en vilo a los inversores, al llevarles cada vez más a asignar activos de manera más táctica para sortear el entorno actual»
