El nuevo impuesto morderá las ganancias por intereses y comisiones de los bancos
El impuesto del Gobierno a la banca gravará el 4,8% de sus ingresos por intereses y comisiones. El de las eléctricas será el 1,2% sobre el volumen de negocio
La coalición de Gobierno formada por PSOE y UP presentó en el Congreso de los Diputados su proposición de ley para recaudar nuevos impuestos a la banca española.
Finalmente, el impuesto con el que se gravará a las entidades financieras no será sobre los beneficios, sino sobre los márgenes de la banca por intereses y comisiones. Es el llamado margen de intermediación.
Es decir, la diferencia entre las comisiones e intereses que cobran y las que pagan. Se trata de la cifra que mejor radiografía la salud del negocio tradicional de las entidades.
En concreto, el impuesto a la banca recaerá en las empresas que tengan unas ganancias de más de 800 millones en el sumatorio de intereses y comisiones netas, y se aplicará durante los años 2023 y 2024, sobre las cifras del año anterior.
El Gobierno apela a las estimaciones de beneficios para justificar su impuesto
"En el contexto actual, los costes que origina la inflación en la sociedad han de ser repartidos equitativamente mediante un pacto de rentas", apuntaba la proposición de ley presentada por PSOE y UP.
"Los sectores en los que la subida de precios puede incrementar en mayor media sus beneficios son el sector eléctrico, gasista y petrolero, y el de las entidades de crédito", añadía.
Tras estos enunciados, la proposición de ley presentada por la coalición de Gobierno enumeraba cifras como los intereses cobrados por las entidades de crédito, que situaba en los 38.286 millones de 2016 a 2019, o el hecho de que Morgan Stanley calculara un beneficio de 26.000 millones de euros para los grandes grupos del sector en 2023.
Por todo lo anterior, se afirmaba en la proposición de ley, "se considera que el sector energético y el sector de las entidades de crédito pueden contribuir a reforzar el pacto de rentas".
El IBEX 35 se revuelve contra la proposición de ley
En una jornada marcada por las presentaciones de (buenos) resultados por parte de múltiples empresas del IBEX 35, el indicador de referencia de la bolsa española perdía cerca del 0,6 por ciento, después de que se dieran a conocer los detalles de la propuesta de recaudación fiscal del Gobierno.
Los consejeros delegados de las grandes empresas, asimismo, siguieron la estela marcada por Bankinter durante su presentación de resultados trimestrales, dejando muestras visibles de su descontento con la medida anunciada, que todavía tendrá que ser aprobada en el Congreso.
"La inflación difícilmente se combate con impuestos", afirmó el consejero delegado de Banco Santander, José Antonio Álvarez, durante su presentación de resultados del primer semestre.
De igual manera se expresó Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol, después de conocer la medida, que en el caso del sector energético gravará a empresas como la suya con un impuesto del 1,2 por ciento sobre el importe neto de su cifra de negocios.
"Ahora hablan de un 1,2 por ciento y mañana de un impuesto diferente. No tenemos ninguna pista sobre ello. En todo caso, la propuesta debe ser analizada y debe pasar por el proceso parlamentario. Dicho esto, tenemos confianza porque no tiene sentido la aplicación de este tipo de medidas (...), máxime en un negocio que es cíclico. Asimismo, creo en el marco sólido legal que tenemos”, indicó Imaz durante la conferencia dada por su compañía.
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