El SEPE reconoce el bordado con seda y oro como especialidad formativa

El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha reconocido el bordado con oro y seda propio de la Semana Santa de Lorca como especialidad formativa de la familia de las artes y la artesanía, lo que lo consolida como un oficio profesionalizado y lo abre a su enseñanza reglada para garantizar su supervivencia futura.

Lo ha anunciado hoy la concejala de Desarrollo Local, Sandra Martínez, acompañada de representantes de la asociación El Arte del Bordado de Lorca, que ha considerado que este reconocimiento "supone la consolidación de este arte tan apegado a Lorca como un trabajo profesional con vocación de futuro".

Martínez ha dicho que se trata de una "noticia excepcional" para el bordado lorquino y que "ofrece la justa recompensa al trabajo desarrollado durante los últimos meses para conseguir que sea reconocido dentro del catálogo del SEPE" como una especialidad profesional del ámbito artesano.

La edil ha señalado que sobre el bordado hasta ahora pesaba el marchamo de que era "una labor ajena al mercado laboral y más cercana al ámbito del ocio", pero este reconocimiento del SEPE lo convierte en "un oficio que requiere de formación y de experiencia" y que se puede convertir en un medio de vida.

Además, ha considerado que "reconoce la competencia profesional de las bordadoras de Lorca y la pone al nivel de cualquier otra profesión estableciendo los itinerarios formativos pertinentes" para poder aprender el oficio.

Para conseguir esta equiparación formativa, el departamento de Martínez ha elaborado en los últimos meses "estudios y anexos que han consolidado un corpus sobre el bordado como especialidad laboral especificando nivel de cualificación, prescripción de formadores, equipamientos y una relación secuencial de módulos formativos para el aprendizaje de la técnica".

La declaración abre al ayuntamiento la posibilidad de solicitar financiación para poner en marcha nuevos recursos de formación y creación de empleo basados en el bordado con oro y seda.

Martínez ha adelantado que la intención del ayuntamiento es ahora la consecución del nivel 2 de especialidad formativa, que requiere una mayor especialización en el oficio y en el proceso de formación.

El final del recorrido será la consecución del certificado de profesionalidad, que "marcará un punto álgido" para el bordado lorquino y garantizará su supervivencia en el futuro con su enseñanza en las aulas.

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