Brasil crea 47.319 empleos formales en el mejor julio desde 2012

Brasil, la mayor economía de Sudamérica, generó en julio pasado 47.319 empleos formales, lo que supone el mejor resultado para[…]

Brasil, la mayor economía de Sudamérica, generó en julio pasado 47.319 empleos formales, lo que supone el mejor resultado para ese mes de los últimos seis años, informó hoy el Gobierno.

En el séptimo mes de este año fueron contabilizadas 1.219.187 contrataciones frente a 1.171.868 despidos, según datos del Registro General de Empleados y Desempleados (Caged, en sus siglas en portugués) del Ministerio de Trabajo.

Brasil no obtenía un saldo tan positivo de creación de puestos de trabajo con todas las garantías de la ley desde julio de 2012, cuando el país creó unos 142.400 empleos formales.

El resultado de julio revierte además el registrado en junio pasado, cuando se destruyeron 661 trabajos formales.

En lo que va de año, el gigante suramericano ha creado 448.263 empleos con contrato formal, una cifra que se reduce hasta los 286.121 si se tienen en cuenta los últimos doce meses.

Aun así, de mantenerse esa tendencia al cierre de este 2018, Brasil pondrá fin a tres años consecutivos de caídas en los índices de creación de trabajos con todas las garantías.

Entre 2015 y 2017 fueron destruidos en el país latinoamericano unos 2,88 millones de empleos formalizados.

La economía brasileña, que creció el 1,0 % en 2017, se encuentra en pleno proceso de recuperación tras la profunda recesión de los dos años anteriores, que provocó una caída acumulada del Producto Interno Bruto (PIB) del 7 %.

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La crisis golpeó especialmente el mercado de trabajo y disparó la tasa de desempleo, que aún hoy continúa en cotas altas al situarse en junio pasado en el 12,4 %, equivalente a 13 millones de personas en paro.

Las dudas sobre la economía brasileña persisten por un escenario externo más adverso y por las elecciones presidenciales del próximo octubre, que se presentan como las más inciertas de su historia reciente.

El Banco Central y el Gobierno brasileño han reducido sus previsiones de crecimiento para este año desde el 3,0 % hasta el 1,6 %, en línea con las estimaciones del mercado financiero, que pronostica una expansión del producto interno bruto (PIB) del 1,49 %.

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