Teleoperadores logran preacuerdo con la patronal tras dos años de conflicto
Los sindicatos CCOO y UGT han alcanzado hoy un principio de acuerdo con la patronal de teleoperadores sobre el nuevo[…]
Los sindicatos CCOO y UGT han alcanzado hoy un principio de acuerdo con la patronal de teleoperadores sobre el nuevo convenio colectivo del sector, que contempla subidas salariales y convertir en indefinida a toda la plantilla que se incorporó antes de junio de 2010 con contratos de obra.
El futuro convenio, que abarcará desde el 1 de enero de 2015 al 31 de diciembre de 2019 y que no cuenta con el respaldo de CGT, pone fin a dos años de conflictividad laboral, en los que el sector ha afrontado diversas jornadas de huelga de 24 horas que han alterado el funcionamiento normal de los servicios de atención al cliente de las principales compañías del país.
Entre los puntos más relevantes del preacuerdo destaca una subida salarial equivalente al IPC del año anterior más un extra variable durante los ejercicios 2018 y 2019, según el documento al que tuvo acceso Efe.
Así, este año los salarios subirán un 1,6 % con carácter retroactivo desde enero de 2017.
En 2018 se actualizarán con el IPC de 2017 y en 2019, con la inflación de 2018. Además, en ambos casos los salarios subirán un 0,5 % adicional en virtud del acuerdo alcanzado con la Asociación Española de Contact Center (ACE), la patronal del sector.
El 100 % de los trabajadores contratados por obra y servicio con anterioridad al 18 de junio de 2010 pasarán a ser indefinidos a más tardar el 31 de diciembre de 2018.
Los contratos por obra anteriores a 2008 pasarán a ser indefinidos a los 15 días de que el convenio se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y los anteriores a 2009 pasarán a la nueva modalidad el 31 de diciembre de este año.
Adicionalmente, al menos el 50 % del personal de operaciones pasará a ser indefinido.
Los turnos de trabajo partidos, con los que los sindicatos se han mostrado tradicionalmente muy contrarios, irán reduciendo su peso progresivamente, puesto que el preacuerdo contempla la creación de dos nuevos turnos continuados, de 9 a 18 horas y de 12 a 21 horas, a los que podrán acogerse los contratados a jornada completa y a los que tendrán prioridad la plantilla vigente frente a las nuevas incorporaciones.
Los horarios de trabajo se comunicarán con una antelación mínima de 14 días y solo podrán modificarse un 20 % de los mismos con una semana de preaviso.
Los teleoperadores trabajarán un máximo de ocho días seguidos frente a los once vigentes y se respetarán los fines de semana que coincidan entre dos meses.
Las excedencias especiales inferiores o iguales a siete días no se liquidarán y se duplicará el descanso de las trabajadoras embarazadas a partir de la 22 semana de gestación.
CCOO y UGT afirman haber conseguido mantener los derechos sociales que disfrutaba ya el sector y que, según ellos, la patronal quería restringir, al haber pretendido incrementar los meses en periodo de prueba o reducir las horas de permiso retribuidas para acudir al médico o acompañar a menores y a familiares dependientes.
El secretario general de Telemarketing de CGT, Santiago Alonso -cuyo sindicato no se ha sumado al preacuerdo-, ha criticado la propuesta pactada entre CCOO y UGT y la patronal ACE porque "no resuelve ningún problema que genera la precariedad".
Alonso ha explicado a Efe que las subidas salariales hasta 2019 "no garantizan que no se pierda poder adquisitivo" y que el preacuerdo no resuelve otros problemas, como el solapamiento entre libranzas y festivos, la extinción de contratos de obra con una indemnización o la conciliación de la vida laboral y familiar.
CGT ha asegurado que rubricará el acuerdo si no se producen modificaciones sustanciales.