Renault crea una nueva filial en Irán para fabricar con el socio local IDRO

El grupo automovilístico francés Renault anunció hoy la creación de una nueva filial en Irán, la tercera, en este caso[…]

El grupo automovilístico francés Renault anunció hoy la creación de una nueva filial en Irán, la tercera, en este caso con el IDRO, un fondo de inversión y renovación industrial, para la fabricación y la distribución de coches.

Los primeros vehículos producidos a partir de 2018 en el marco de esta nueva asociación -en la que Renault tendrá la mayoría del capital-, serán los modelos Symbol y Duster, en una fábrica que ya existe pero que se tiene que poner a nivel, explicó a Efe una portavoz de la compañía francesa.

Esa factoría tendrá, en una primera fase, capacidad para el ensamblaje de 150.000 vehículos anuales, que se sumarán a los 200.000 que potencialmente ya podría fabricar Renault en Irán gracias a sus acuerdos con los otros dos socios locales que tiene, Saipa e Irán Khodro.

La nueva filial común integrará un centro de ingeniería (para adaptar los modelos a los requerimientos locales del país) y un centro de compras para favorecer el acceso a proveedores iraníes.

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Además, una de las novedades es que el grupo francés va a desarrollar su propia red de distribución en Irán.

El compromiso con IDRO se concluyó en el marco del Salón del Automóvil de París que ha comenzado esta semana, en presencia del presidente de Renault, Carlos Ghosn, y del ministro iraní de Industria, Mohamed Reza Nematzadeh.

Renault está presente en Irán desde 2003 a través de los acuerdos con Saipa e Irán Khodro, pero las sanciones internacionales habían impedido una expansión importante hasta muy recientemente, de forma que en todo ese tiempo juntos han producido 500.000 vehículos.

En 2015, las ventas de la compañía francesa allí progresaron un 56,1 % hasta un total de 51.500 vehículos, lo que supuso una cuota de mercado del 4,8 % con los modelos Tondar, Tondar pick-up, Sandero y Sandero Stepaway.

El objetivo de la marca del rombo es incrementar su cuota de mercado al 20 % en el horizonte de 2020, cuando se espera que se vendan en Irán unos 2 millones de vehículos, lo que significaría unas 400.000 unidades.

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