La AIE duda que Francia cumpla sus planes de transición energética

La Agencia Internacional de la Energía (AIE) tiene dudas sobre la real ejecución de los planes de "transición energética" que[…]

La Agencia Internacional de la Energía (AIE) tiene dudas sobre la real ejecución de los planes de "transición energética" que Francia se ha fijado, en particular para incrementar el peso de las renovables y disminuir el de la nuclear, que parte de niveles récord.

En su informe sobre la estrategia energética de Francia, presentado hoy, pide que el objetivo del presidente francés, François Hollande, de reducir la cuota de la electricidad de origen nuclear del 78 % actual al 50 % en 2025 se haga garantizando la seguridad del suministro y con un bajo nivel de emisiones de CO2.

La cuota hasta ese 50 % significará "el cierre de gran número de plantas" atómicas y que, en función de otros factores -como la evolución de la demanda y de las renovables- puede afectar al precio final de la electricidad, así como al nivel de emisiones, al aprovisionamiento de Francia, pero también al de países vecinos que ahora importan su corriente.

La agencia recuerda que, debido al alto peso de la electricidad de origen atómico (el más elevado de todos los países de la AIE), Francia es uno de los miembros que menos dependen de los combustibles fósiles, que representaban un 47 % de la producción energética final en 2015.

Publicidad

En paralelo, los autores del informe reclaman que se tenga en cuenta "la seguridad" y la dimensión económica en las inversiones que están previstas en el sector de la energía nuclear en Francia.

A ese respecto, aluden no sólo la central de nueva generación (tipo EPR), que se está construyendo en Flamanville, en la costa de Normandía, sino también los 47.500 millones de euros -según la nueva evaluación de 2015- que se tendrán que invertir para prolongar la vida útil de la mayor parte de los reactores en servicio.

La agencia se muestra escéptica sobre el objetivo de incrementar el papel de las renovables en la producción eléctrica, del 16,5 % anual al 40 % en 2030.

En el caso de la producción energética total, estima que no se ha hecho lo suficiente para que del 15 % actual que suponen las renovables ahora se alcance el 23 % para 2020.

Sobre todo, porque eso necesitaría que en el periodo 2015-2020 se duplicara la tasa de progresión de los nueve años precedentes (2005-2014).

La AIE reconoce que se ha avanzado rápidamente con la energía solar fotovoltaica y con la biomasa, pero no con la eólica o la hidroeléctrica.

Según su análisis, los retrasos con la eólica tienen que ver más con barreras administrativas y con procedimientos judiciales que con elementos de orden económico.

"El éxito de la transición energética en Francia dependerá de la movilización de inversiones significativas para el incremento de la energía renovable y de la eficiencia energética, así como del cierre" de una parte del parque nuclear, resume la AIE.

En portada

Noticias de