Asociaciones de autónomos rurales reclaman diálogo sobre patata y eucalipto

Dirigentes de las asociaciones Fruga y Oruga, de agricultores y trabajadores autónomos del ámbito rural, reclamaron hoy a la Administración diálogo para resolver los problemas de la patata o el eucalipto y elecciones para establecer órganos de representatividad.

Una delegación de miembros Fruga y Oruga se reunió esta mañana con diputados del PPdeG, En Marea y BNG, y tiene previsto hacerlo próximamente con otros del PSdeG, para exponer sus reclamaciones y solicitar iniciativas ante el Parlamento de Galicia.

En una conferencia de prensa los diputados Manuel Lago y Xosé Luís Rivas, de En Marea y del BNG, respectivamente, expresaron junto a los representantes de Fruga y de Oruga, su compromiso a presentar una iniciativa ante el Parlamento de Galicia, ya sea de manera conjunta o por separado.

El coordinador de Fruga, Manuel Dacal, y el presidente de Oruga, Tomás Díaz Castañeira, que también participaron en la conferencia de prensa, destacaron tanto la falta de diálogo con la Administración autonómica como la ausencia de convocatoria de elecciones en el ámbito rural para establecer representantes del sector.

Dacal señaló que un representante del PPdeG con el que se reunieron esta mañana se comprometió a definir su posición la próxima semana y evocó la posibilidad de alcanzar un "consenso" con las demás fuerzas políticas en ese sentido.

Fruga ya presentó en 2014 una propuesta a los grupos parlamentarios para que reconociera el papel representativo de esa asociación para contribuir a debatir y dialogar sobre los problemas en el ámbito rural, aunque precisó que no consiguió que prosperase, apuntó Dacal.

Los representantes de las dos organizaciones apuntaron la indefinición existente acerca de la convocatoria de elecciones para establecer representantes en el ámbito rural que permitan ejercer de interlocutores ante la Administración, así como las dificultades para calcular el número autónomos y otros agentes del sector.

"Hay temas que ahora son muy conflictivos en el rural", comentó Díaz Castañeira, quien apuntó a la plaga que afecta a plantaciones de patata en una treintena de municipios gallegos se ha convertido en una "patata caliente", como también a la proliferación de eucaliptos, una especie invasora que amenaza en algunos puntos de Galicia a árboles autóctonos.

El representante de Oruga subrayó que la actividad económica en el ámbito rural va "más allá" de la agricultura, de manera que una falta de desarrollo conlleva un problema demográfico añadido que corre el riesgo de convertir a los agricultores gallegos en una "especie en vías de extinción".EFE

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