El Consejo Económico y Social (CES) advierte de que los nuevos mecanismos de gobernanza económica de la Unión Europea (UE) han provocado una reducción del papel de las organizaciones sindicales y empresariales, y echa en falta en el Plan Juncker una evaluación de los efectos reales de la inversión inducida en términos de crecimiento y empleo.