Bankia descarta conseguir su objetivo de beneficio de 1.300 millones para 2020

El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha reconocido durante la presentación de resultados semestrales de la entidad que con la situación actual de los tipos de interés, y con el nuevo escenario monetario que se abre en el futuro, no van a poder alcanzar el objetivo de beneficio de 1.300 millones de euros para el próximo ejercicio. Sevilla no ha dado una nueva cifra concreta de beneficio para 2020, pero espera que no se aleje en demasía de lo estimado previamente.

Sevilla ha querido quitar hierro al asunto al comentar que "para el mercado no era ninguna sorpresa esta situación y los analistas ya lo iban exponiendo en sus análisis, por lo que las cotización también".

Por tanto, no cumplirán con lo expuesto en su plan estratégico y Sevilla ha apuntado también que tienen que "incorporar nuevas medidas para paliar el entorno negativo", pero entre estas medidas descarta cobrar por los depósitos a los minoristas. Con todo, lo que sí que tiene claro el consejero delegado es que los tipos de interés en negativo penalizan la rentabilidad del sector bancario. Sevilla creelos tipos bajos "nos parecen deseables, pero no  los negativos porque rompen la ecuación de rentabilidad de las entidades financieras". 

Fusión con otra entidad

El consejero delegado de la entidad ha descartado una fusión del banco con cualquier otra entidad, pero ha reconocido que la actual política de tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE), y más cuando entren en negativo, "ponen más presión en los gastos de explotación como principal palanca para mejorar la rentabilidad" por lo que se entienden la opción de las fusiones, ha explicado. Estas declaraciones vienen de la mano de los comentado por su homólogo de Banco Sabadell, Jaime Guardiola, que reconoció que el precio actual del dinero presionaba los márgenes y puede llevar a operaciones de concentración.

Por su parte, Sevilla ha afirmado que Bankia, cuando planificó su plan estratégico actual, "no observó ninguna operación inorgánica" en los 3 años que duraría el plan estratégico, hasta 2020, y ha recordado que ellos ya han tenido su propia fusión, BMN. Con todo, creen que tienen "un buen ratio de eficiencia y creación negocio". Así, ha afirmado que el compromiso de devolver los 2.500 millones de euros de exceso de capital a los accionistas viene de "no ver ninguna opción de concentración para el periodo del plan estratégico".

En este sentido, se han devuelto hasta la fecha 203 millones, por lo que quedan más de 2.000 para devolvernos desde este segundo semestre hasta el año que viene, "en el momento más adecuado". No ha concretado fecha, "será cuando el consejo crea que se ha generado ese momento". Sevilla ha reafirmado que su destino era devolvernos a los accionistas "y así seguirá siendo".

Dividendo generado

La entidad ha dedicado un total de 354 millones de euros al pago de dividiendo con cargo a los resultados del ejercicio anterior. Para este ejercicio, hay  reservados 203 millones para el pago correspondiente al primer semestre de este ejercicio. Con todo, el dividendo ha pasado en un año de 4,19 euros por acción hasta los 4,23 euros actuales, y si se suman los 0,12 de dividendo pagado ya durante este ejercicio la suma se eleva hasta 4,35 euros por título.

"No está descartado que se vaya a repartir durante el segundo semestre un pago de dividendo extraoridanario sobre estos 2.500 millones", ha afirmado Sevilla. Otra cuestión es si con la situación actual de tipos se puede seguir generando rentabilidades para alcanzar estos pagos, Sevilla cree que sí.

Salida a Bolsa

"La salida a Bolsa fue un error, pero no un delito", ha declarado Sevilla, que ha señalo "cómo les testigos de diferente índole que han ido declarando a lo largo de este tiempo han manifestado que aunque no fue una buena idea, tampoco fue un delito". Sevilla ha querido recordar como la entrada de Bankia en los mercados fue "completamente reglada, revisada y auditada".

Para el número dos de la entidad, la acción no tiene en cuenta este hecho a nivel reputacional, "como tampoco lo tienen el caso de las preferentes, ni para los inversores ni para nuestros clientes, que es lo más importante", ha dicho Sevilla.

Respecto a la culminación del proceso de privatización, fijado en principio para 2021, el consejero delegado ha pedido "calma y no meter presión", ya que el consejo trabaja tomando el pulso a la situación tanto de la entidad como del mercado. Respondía así a la propuesta de Unidas Podemos de crear con Bankia un "banco público. En cambio, Sevilla ha expuesto que lo mejor para la entidad es la privatización trabajando como se ha hecho hasta ahora.

En relación a la falta de gobierno en España, Sevilla ha recordado que no es la primera vez que España vive esta situación y que la economía demostró, al igual que lo está haciendo en este momento, "su capacidad de crecimiento, creación de empleo y buenas perspectivas".